El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha agradecido este martes "su trabajo" a la catedrática de Historia de la Construcción Amparo Graciani, quien ha dimitido del cargo de comisaria de la conmemoración del centenario de la Exposición Iberoamericana de 1929, alegando la "desatención" que ha sentido por parte del Consistorio y "la falta de mimbres" para construir el proyecto.
Ante la renuncia de Graciani, Sanz ha destacado que se trata de una "gran profesional" y ha agradecido su labor al frente del proyecto, una de las principales apuestas del Gobierno local en materia de marca y planeamiento estratégico, toda vez que la comisaria dimisionaria ha lamentado "la falta de apoyos" en lo que "debía ser un proyecto de ciudad, con una visión transversal amplia y una apuesta verdadera del Ayuntamiento".
Y después de que Graciani augurase que "probablemente se dé a la persona que lo vaya a liderar todo lo que" ella ha echado en falta, vaticinando que se trata de una "persona está muy vinculada a la Cámara de Comercio", el alcalde ha confirmado que propondrá al pleno que el testigo sea recogido por Julio Cuesta. "No tenemos ni un minuto que perder", ha enfatizado el alcalde.
Julio Cuesta, miembro de la Cámara de Comercio y hasta ahora era suplente del presidente de dicha entidad en el Comisariado de Sevilla 2029; fue director de Comunicación y Relaciones Externas y jefe de Protocolo de la Exposición Universal Sevilla de 1992, presidente de la Fundación Cruzcampo entre 2012 y 2016 y actual presidente de honor, miembro de la Comisión Permanente para la Promoción Exterior de Sevilla y de la Comisión Permanente de Fibes entre 2005 y 2014; funcionario del Departamento de Estado de los Estados Unidos, especialista en Asuntos Culturales, Públicos y de Intercambio entre 1976 y 86, Hijo Predilecto y Medalla de Oro de Sevilla; académico correspondiente de la Academia de Medicina y Cirugía y como doctor en Sociología, ha sido profesor en las universidades de Texas, Tulane y Wisconsin, Sevilla, Loyola Andalucía y CEU.
