El Betis continúa con su maldición en el Cívitas Metropolitano y este Domingo de Ramos volvió a caer derrotado ante el Atlético de Madrid. Los de Pellegrini dieron la cara, pero cuando tenía el empate amarrado Ángel Correa apareció para dejar los tres puntos en Madrid.

Los de Pellegrini fueron capaces de competir a pesar de no contar con Sergio Canales y Nabil Fekir. La plantilla dio un paso adelante ante un rival directo, pero no pudo ser. Lo jornada se cierra de forma agridulce porque el Villarreal se acercó pero la Real Sociedad sigue a tres puntos. En cualquier caso, el Betis sigue dependiendo de sí mismo de cara a la clasificación para la próxima Liga de Campeones.

El equipo verdiblanco no estuvo demasiado expeditivo en ataque pero muy sólido en defensa. La zaga liderada por Luiz Felipe estuvo imperial durante todo el partido. Cuando hubo alguna pequeña fisura Rui Silva apareció para evitar el gol. El guardameta portugués sigue demostrando que en condiciones normales debe ser el titular por delante de Claudio Bravo.

Con el partido controlado el Betis no fue capaz de dar un paso adelante. La gran cantidad de bajas dejaron sin demasiadas opciones a Manuel Pellegrini, que acertó con los cambios pero que no tuvo suficiente pólvora en el banquillo. Joaquín entró en los compases finales y generó bastante peligro.

El duelo se hubiera resuelto con un empate de no ser por el tanto de Ángel Correa. Con más corazón que fútbol, el argentino se quedó con un par de rebotes en una de las últimas jugadas del encuentro, se plantó en frente de Rui Silva y lo batió. El Betis no tuvo ni tiempo ni capacidad para reaccionar.

Los de Pellegrini se despiden de una racha de seis partidos sin perder pero siguen metidos en la pelea por la Champions.