Alrededor de las tres y cuarto de la tarde se desataba un incendio en la parcela adyacente al Punto Limpio de Rota, concretamente donde se acumulan los restos de poda de palmeras y otros restos vegetales. Aún se desconocen las causas, aunque desde Protección Civil consideran que ha podido ser fortuito, y que el calor y el viento han hecho que se propague con rapidez, generando una espesa columna de humo blanco que ha obligado a la Policía Local a cortar al tráfico por seguridad la carretera de entrada a Rota, desviando a los vehículos por la rotonda Villa de Rota hacia la nueva rotonda de la avenida Libertad.
El incendio no ha provocado daños materiales ni personales, y ha sido rápidamente controlado tanto por el Grupo Contraincendios de Protección Civil, como por los Bomberos de la Base y un grupo operativo de la Armada Española. Para evitar la propagación del incendio hacia las instalaciones del Punto Limpio, donde se acumulan otros materiales que, de quemarse, podrían haber complicado mucho la situación, los bomberos han creado un cortafuegos, y han asfixiado las llamas desde ambos lados de la carretera, gracias a la colaboración de un camión de la Armada que ha proyectado un potente chorro de agua, facilitando los trabajos de extinción.
En la zona se personaron los delegados municipales Óscar Curtido, Francisco Laynez, Antonio Izquierdo y Paco Corbeto, para comprobar la evolución de los trabajos y que el operativo puesto en marcha controlaba la situación por completo, aunque en estos momentos los bomberos permanecen en la zona, ya que se sigue generando humo, y la montaña de restos vegetales es bastante grande, por lo que hay que asegurarse de que no queda ningún rescoldo que pudiese reavivarse a causa del viento. Para ello, los servicios contraincendios no abandonarán la zona hasta que se descarte por completo la posibilidad de un repunte del fuego.
Lo aparatoso del incendio y sobre todo del humo generado ha hecho que muchos vecinos se acerquen a la zona, alarmados por este suceso, ya que la columna de humo blanquecino podía distinguirse a gran distancia. Pero afortunadamente se ha quedado en un susto.