Benito Gómez y Restaurante Bardal de Ronda han sido premiados con una estrella Michelin. Nos cuentan como han encajado la noticia.
Tener una estrella Michelin en el mundo de la cocina es comparable a recibir un oscar en el cine o un laureus en el deporte. Sólo los tienen los mejores. El Restaurante rondeño Bardal y su chef Benito Gómez han sido reconocidos con este importante galardón gastronómico de la Guía Michelin España&Portugal 2018.
¿Qué supone para ti que se premie tu trabajo con una estrella Michelin?
--Es el resultado de un año de mucho esfuerzo y mucho trabajo por parte de todo el equipo y estamos muy contestos y satisfechos.
¿Por qué crees que el jurado ha elegido Bardal y tu trabajo para premiarlo?
--Yo entiendo que como la Guía Michelin es de una empresa privada habrán venido les habrá gustado nuestro trabajo y habremos dado en el clavo de lo que ellos entienden que debe ser un restaurante con una estrella Michelin.
¿En los años que llevas en el mundo de la cocina pasó por tu cabeza tener una estrella Michelin?
--Hay momentos en los que lo piensas al principio, pero al montar Bardal lo hicimos porque a mi me gusta este mundillo de la cocina pero en ningún momento montamos el restaurante pensando en obtener una estrella.
Obviamente sabemos que la llegada de la estrella Michelin refuerza mucho este proyecto y te posiciona en el mundo internacionalmente. Y nos hace ilusión tener este reconocimiento en tan sólo un año funcionando.
¿Tienes algún referente en el mundo de la cocina?
--Admiro a mucha gente, no te podría decir un sólo nombre. Básicamente admiro a todo aquel que está metido en una cocina y trabaja honestamente.
¿Qué sentimientos produce a Benito Gómez confeccionar un plato en su cocina?
--Yo me siento muy afortunado por que hago lo que más me gusta que es estar metido en la cocina y cuándo uno hace las cosas y empiezan a fluir pues me pongo muy contento como cualquier persona que hace lo que le gusta.