En cuanto a nuevos casos se han contabilizado 25.853, lo que eleva a 1.480.874 los contagios desde que se desatara la emergencia
Italia sumó 722 fallecidos por coronavirus en el último día, uno de los peores datos de la segunda oleada de la pandemia, pero la curva de contagios sigue aplanándose y descendió el número de hospitalizaciones, confirmó hoy el Ministerio de Sanidad.
Aunque esta cifra de muertos supone uno de los peores datos, es inferior a los 853 de ayer, a niveles del pasado marzo, y el balance provisional asciende así a 52.028 defunciones.
En cuanto a nuevos casos se han contabilizado 25.853, lo que eleva a 1.480.874 los contagios desde que se desatara la emergencia a mediados de febrero pasado.
Los nuevos positivos se han detectado gracias a un alto número de pruebas diagnósticas, 230.007 en total, ligeramente superior al de los últimos días,pero muy por debajo de las casi 40.000 infecciones notificadas diariamente hace solo una semana.
En paralelo, la presión en los hospitales empieza poco a poco a descender.
De los 791.697 enfermos con la COVID-19 actualmente en Italia, la gran mayoría está en su casa con apenas síntomas y 38.161 se encuentran ingresados, 232 menos que el martes.
No obstante, aumentan los hospitalizados en cuidados intensivos, hasta los 3.848, un aumento de 32 respecto a ayer.
También han crecido notablemente el número de personas curadas o dadas de alta, un total de 31.819 desde ayer.
Ante estos datos, las regiones más afectadas, que permanecen confinadas por decreto, empiezan ya a pensar en la reducción de limitaciones en los próximos días.
El presidente de Piamonte (norte del Italia), Alberto Cirio, vaticinó que pasarán de zona "roja" a "naranja", con menos restricciones, entre el 1 y el 3 de diciembre, pues la infección "se ha ralentizado mucho" en ese territorio, muy afectado por el virus.
Lombardía, epicentro de la pandemia en Italia desde el comienzo de la crisis, aspira a liberarse un poco a partir de este fin de semana, según su gobernador, Attilio Fontana.
Por otro lado, Italia piensa ya en un programa de vacunaciones para cuando la Comisión Europea reparta las dosis que ha contratado con varias multinacionales que trabajan en ellas.
El ministro italiano de Sanidad, Roberto Speranza, presentará su plan el próximo 2 de diciembre y ya se ha lanzado un concurso público para suministrar al Estado cien millones de jeringas y agujas.
Asimismo, el Gobierno prepara un nuevo decreto con las medidas a tomar de cara al mes de diciembre, pues las actuales disposiciones expiran el próximo día 3 y, sobre todo, ante las fiestas navideñas.