Unas 45 personas han sido rescatadas con vida tras el sismo y ahora las últimas labores de rescate se concentran en el barrio periférico de Elazig
Continúan las labores de rescate para salvar a dos personas atrapadas bajo los escombros tras el terremoto de magnitud 6,8 en la escala de Richter que azotó el este de Turquía el pasado viernes y que ha causado 39 víctimas mortales.
Unas 45 personas han sido rescatadas con vida tras el sismo y ahora las últimas labores de rescate se concentran en una vivienda en el barrio periférico de la ciudad de Elazig, en el sureste de Anatolia, donde siguen atrapadas dos personas.
El temblor, con epicentro en una zona rural de la provincia de Elazig, ha afectado a unas 1.600 personas, que acudieron a hospitales de la zona, si bien solo un centenar sigue en tratamiento.
Se espera que en las próximas horas las autoridades retiren los escombros de los 87 edificios que se han derrumbado y de otros 1.200 que resultaron gravemente dañados por el sismo.
Desde el temblor ya se han registrado más de 800 réplicas, veinte de ellas por encima de la magnitud de 4, pero aparentemente sin causar nuevos daños.
La provincia de Elazig se ubica en el cruce de dos importantes fallas geológicas que convierten Turquía en un país con muy frecuentes sismos, si bien los terremotos por debajo de la magnitud 6, muy habituales también en el oeste de Anatolia, no suelen causar víctimas y normalmente solo provocan daños menores.