La Comisión Europea (CE) afirmó este martes que la decisión de la rusa Gazprom de reducir el suministro de gas por el gasoducto Nord Stream está "políticamente motivada" y no responde a razones técnicas.
"Sabemos que no hay una razón técnica para hacer eso (recortar el suministro por el Nord Stream). Este es un paso políticamente motivado y tenemos que estar preparados para eso y, exactamente por esa razón, la reducción preventiva de nuestra demanda de gas es una estrategia sabia", declaró la comisaria europea de Energía, Kadri Simson, a su llegada a la reunión de ministros del ramo de los Veintisiete.
Los titulares comunitarios se reúnen hoy en Bruselas para intentar cerrar un acuerdo político sobre el plan de la Comisión Europea para reducir el consumo de gas con vistas al invierno, ante el temor a un corte total del suministro por parte de Rusia.
El encuentro tiene lugar un día después de que el gigante gasístico ruso Gazprom anunciara que a partir del 27 de julio reducirá a la mitad del flujo actual, que era del 40 % de la capacidad, el suministro de gas por el gasoducto Nord Stream, lo que supone que solo llegará por esa infraestructura 33 millones de metros cúbicos diarios.
La comisaria de Energía aseguró que esa medida no cambia la "perspectiva" de Bruselas.
"Los anuncios de ayer de Gazprom subrayan una vez más que tenemos que estar preparados para los posibles cortes de suministro de Rusia en cualquier momento y para estar preparados para eso tenemos que actuar ahora mismo, cuidar el estado de nuestra preparación, abordar esta crisis ahora mismo y juntos", expuso.
Dijo que haciendo eso la UE "reducirá su demanda de forma preventiva y eso permitirá seguir rellenando el almacenamiento de nuestro gas subterráneo, que está ahora en el 66 %".
La política estonia reconoció que los Estados miembros tienen "diferentes circunstancias, diferentes posiciones de partida" y admitió que las interconexiones "no son suficientes para algunos Estados miembros".
"Pero espero que al final del día tengamos un acuerdo político", confió.
El ministro checo de Industria y Comercio, Jozef Síkela, cuyo país ocupa la presidencia rotatoria de la UE, dijo que se sabe con seguridad que el presidente ruso, Vladímir Putin, seguirá durante el invierno "chantajeando" con el suministro de gas, por lo que llamó a "preparar y proteger" los hogares y la economía ante esa situación.
Añadió que el reciente ataque ruso contra el puerto de Odesa, clave para la exportación de cereal ucraniano, muestra que Moscú "no es y nunca será un socio fiable".
Subrayó que el anuncio de Gazprom sobre la reducción del suministro "inmediatamente causó un incremento de precios" y llamó a reducir la dependencia con respecto al gas ruso "tan pronto como sea posible".
"La unidad y la solidaridad es la mejor arma que tenemos contra Putin y estoy bastante seguro de que eso será lo que mostraremos al final del día hoy", constató antes de agregar que todos los países han hecho "un gran esfuerzo para lograr un alineamiento".
"No tengo la sensación de que haya alguien que no quiera ser parte del juego", comentó.