La Policía Local de Málaga detuvo el pasado viernes a un hombre de 36 años por presuntamente pegar a su hija de ocho años, que tuvo que refugiarse en el centro educativo donde estudia en la capital malagueña y que se encontraba "aterrada".
El subinspector de la Policía Local de Málaga Carlos Alfaro ha informado a los periodistas de que los hechos tuvieron lugar en la puerta del colegio donde estudia la menor. El progenitor llegó queriendo entrar al centro, algo que se le impidió indicándole que debía esperar en la puerta.
Tras salir la niña, el padre, sin mediar palabra, la golpeó y tiró al suelo, poniéndole incluso la pierna en el pecho para impedir que se levantara, según relataron los testigos. Ante los hechos, progenitores que se encontraban en la puerta del colegio esperando a sus hijos y personal del centro docente le recriminaron su actitud.
La niña salió corriendo por la carretera, ante el peligro que ello suponía, muy nerviosa por la situación "y con miedo", ha explicado el subinspector de la Policía Local malagueña. A continuación, se refugió en el colegio.
La Policía Local llegó al lugar de los hechos al tener conocimiento de lo que sucedía y, tras atender a la niña, contactaron con la madre, que acudió al colegio. Una patrulla las trasladó a un centro sanitario de la capital para examinar a la menor, que presentaba hematomas.
Los agentes averiguaron que el hombre no era la primera vez que agredía a la menor, algo que también hacía con la madre y con la abuela materna, ha indicado Alfaro, quien ha relatado que la niña les relató otras agresiones.
La Policía Local localizó al hombre en casa de su madre. Sin resistencia, los agentes le detuvieron como presunto autor de un delito de malos tratos, siendo puesto a disposición judicial. Quedó en libertad con cargos y medidas cautelares.
Según el subinspector, la madre de la niña no había denunciado hechos similares ocurridos otras veces por miedo. En este sentido, ha agradecido la actuación tanto de los ciudadanos que acudieron en auxilio de la menor como del centro docente, "que actuó con rapidez solicitando presencia policial y dando cobijo, cariño y protección" a la niña de tan solo ocho años.
Alfaro ha solicitado a todas las víctimas de malos tratos que denuncien los hechos, así como al entorno si tuviera conocimiento de este tipo de actos para "poner fin de una vez por todas" a estas agresiones.