Según el Instituto Armado, los hechos ocurrieron la semana pasada, cuando la patrulla en servicio de Castellar, que se encontraba realizando un servicio de seguridad ciudadana por la población, observó una reyerta en la vía pública entre varias personas.
Una vez en el lugar, proceden a la identificación de los participantes, percatándose de que una persona se dirigía hasta allí portando un arma, efectuando dos disparos que impactaron “muy cerca” de los agentes y de las personas que éstos se encontraban identificando, aunque no ha habido que lamentar daños personales.
Tras efectuar los disparos, esta persona comienza a correr, siendo seguido por los agentes que no logran interceptarlo, aunque consiguen hacerse con el arma que el sujeto había arrojado durante la persecución, tratándose de una carabina del calibre 22 con mira telescópica y silenciador, así como un casquillo del mismo calibre.
Los investigadores, mediante la toma de vestigios y declaraciones, llegaron a la identificación y posterior detención de J.M.C., acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa y tenencia ilícita de armas, ya que no poseía documentación.