Para no llegar al parón liguero por el Mundial de Catar inmerso en la zona de descenso, el equipo vigués necesita puntuar este jueves
Tras su derrota ante Osasuna y el empate del Sevilla en el derbi con el Betis, el Celta de Vigo ocupa puestos de descenso al término de la decimotercera jornada, casi un año y dos meses después de que lo hiciera por última vez en LaLiga.
Esa situación se dio en la quinta jornada del pasado curso, después de que el conjunto dirigido entonces por Eduardo “Chacho” Coudet sumase únicamente un punto en sus cinco primeros partidos.
El primer triunfo del Celta llegó en la siguiente jornada, contra el Levante (0-2) en el Ciutat de Valencia, y a partir de ahí siempre se mantuvo fuera de los últimas tres plazas pese a que en la jornada trece solo tenía un punto más que esta temporada.
Para no llegar al parón liguero por el Mundial de Catar inmerso en la zona de descenso, el equipo vigués necesita puntuar este jueves en su visita a Vallecas, o que el Sevilla sea goleado por la Real Sociedad.
El último descenso del Celta a Segunda se produjo en 2007, ya con Carlos Mouriño como presidente. Cinco años después regresó a la máxima categoría y desde entonces siempre se ha mantenido en la élite, aunque sufrió para conseguirlo en los cursos 2012-13, 2018-19 y 2019-20.