Familiares del joven islandés de 18 años que murió el pasado lunes tras caer al vacío desde una atracción del parque temático Terra Mítica de Benidorm han declarado hoy ante la magistrada del Juzgado de Instrucción número 2 de la ciudad, que investiga el accidente.
Los familiares, visiblemente consternados, han llegado al Palacio de Justicia de la ciudad acompañados por el cónsul de Islandia en Benidorm, Juan José Campus.
A la salida, el cónsul, atendiendo a la petición de los familiares, no ha querido hacer declaraciones a los periodistas, aunque sí ha comentado que se ha preguntado a la juez sobre la posibilidad de repatriar ya el cadáver del joven.
Mientras, la Policía Judicial sigue investigando las posibles causas del accidente, que se produjo sobre las 17.00 horas del lunes pasado en la atracción 'Inferno', una montaña rusa invertida en la que los usuarios dan giros de hasta 360 grados y en la que se alcanzan velocidad de hasta 60 kilómetros por hora.
Durante la mañana de ayer, agentes de la Policía Judicial y los ingenieros de Terra Mítica estuvieron haciendo pruebas en la atracción, que sigue precintada.
Desde la dirección del parque adelantaron que estas revisiones continuarán en los próximos días.
Además, explicaron que 'Inferno' dispone de un sistema de seguridad que impide la apertura del arnés cuando las góndolas o vagones están circulando por las vías, ya que ante cualquier incidencia se bloquea el funcionamiento de la atracción, por lo que sólo se pueden abrir si la atracción está parada.
Los responsables del parque se ha puesto en contacto con la empresa constructora de la atracción para que "también haga las verificaciones pertinentes" y con la mercantil que se encarga de la revisión anual de las atracciones, un requisito obligatorio por ley y que 'Inferno' pasó satisfactoriamente el pasado mes de abril.