La pista de atletismo de la Ciudad Deportiva Rafael Sánchez, muy deteriorada por el uso y el paso inexorable del tiempo, iba a ser sustituida al objeto de eliminar los riesgos existentes para quienes practican allí deporte diariamente.
Días pasados se empezó a retirar el pavimento, una intervención para la que se han invertido 50.000 euros, y que se puede concebir como la primera fase de una remodelación completa de la pista que se llevará a cabo a lo largo de este 2019. Al menos ese era la intención inicial.
Las obras que se iban a acometer han encontrado, una vez se ha descubierto el piso, graves problemas con las canalizaciones y socavones que ponen en riesgo la continuidad de ésta.
El pavimento y después de 30 años transcurridos no están en las mejores condiciones, por lo que al ser una obra mayor, necesitará de un nuevo pliego de condiciones municipal que se ajuste a las nuevas obras que hay que acometer allí.
De la misma manera y para que el lógico retraso no suponga más inconvenientes para los deportistas que acuden al recinto deportivo, la ampliación del césped natural -un ajuste marcado y obligatorio según la Federación de Rugby- continuará lo establecido. Unas obras que van englobadas en su conjunto y que requiere ahora de una nueva valoración final.
Esto se suma al estado que presentaban las instalaciones y que la responsable de Deportes, Ana María Arias, señalaba que “la pista estaba a punto de cerrarse para no exponer a sus usuarios a un mayor peligro”.
Ni que decir tiene, este nuevo contratiempo encuentra también con la escasez de espacios reservados para los atletas que, si bien anteriormente se debían verse obligados a trasladarse a localidades vecinas como Jerez, ahora deben hacerlo en Sanlúcar, con la lógica adversidad de gastos e inconvenientes con lo que deben lidiar los atletas.