La protectora de animales Luz y Luna se ha hecho cargo de siete perros más que se encontraban en pésimas condiciones. Según ha comentado una de las encargadas de la protectora, Pilar Fernández, “los perros estaban muy mal, había tres cachorros dentro de una caja y una madre con otro cachorro amarrados y no podían ni moverse”. Y es que, según han confirmado estas mismas fuentes, la persona que acogía estos perros no los tenía bien atendidos, además de que padecía problemas mentales.
Así, miembros de la protectora junto con agentes de la guardia forestal se personaron en el lugar para recoger a estos perros. “Algunas de nuestras colaboradoras llevaban unos dos meses ofreciéndoles a esta persona todo tipo de cosas para que les dejaran llevarse a los perros, debido a las malas condiciones en las que estaban. De hecho, el mismo día que fuimos a rescatarlos tuvimos que llevárnoslos en dos tandas”, ha señalado Pilar.
De esta forma, la protectora cuenta ya con un total de 102 perros y unos 20 gatos y, según indican, no dan abasto. “Hemos tenido que poner una caseta encima de otra, no estamos hacinados porque, evidentemente, aquí los perros tienen un patio grande, pero la verdad es que no tenemos más cabida”, ha puntualizado Pilar.
Y es que, según ha destacado, el número de abandonos va cada día en aumento. “No sabemos a qué se deberá, pero lo cierto es que con la crisis mucha más gente deja a sus perros abandonados o nos llama porque ya no quieren más a los perros”, ha indicado. De hecho, diariamente esta protectora recibe unas siete llamadas diarias, a lo que habría que sumar los abandonos de El Puerto y los del resto de las localidades de la provincia. “Nos ha llegado un dálmata, Pongo, que está hecha la denuncia y están buscando al dueño, pero el perro venía de Puerto Real”, ha ejemplificado la responsable.
Asimismo, Luz y Luna continúa solicitando más colaboración, sobre todo por parte del Consistorio local. “Tenemos pedida una cita con el alcalde para ver si se nos puede ayudar de alguna forma, si nos puede ceder un terreno o aportar ayuda económica que nos permita mantener a los animales”, ha concluido Pilar.
