La segunda parte de la sesión la abre Julio Pardo con ‘Sigo siendo el rey’, mariachis que con una balacera de coplas retoman un tango con sones mexicanos. La fuerza del coro sirve para destacar más si cabe la variedad musical de un grupo que paladea cada cuarteta de su completa actuación.
El piropo a la gaditana, los que algunos dicen que es de machista, saca “robar el alma” de los que siempre defendieron el halago.
La defensa de Andalucía en detrimento del separatismo al que no dudan en “mandar al carajo y disfrutar su independencia”.