Imparable. Esa sería a día de hoy la sensación que se respira en el beticismo con su equipo tras otra muestra más de efectividad de la mejor delantera de Segunda División. Esa que a día de hoy, mantiene al cuadro de Heliópolis liderando en vanguardia la clasificación de la Liga Adelante. Con el plus (que ahora sí) Mel está aportando.
Y eso que las sensaciones iniciales y durante la primera mitad no fueron buenas, tras una semana repleta de vicisitudes extradeportivas que sin embargo, no han afectado al rendimiento del plantel bético, al menos, de momento.
Hasta en tres llegadas; sobre todo una de Araujo en la que el balón levemente salió desviado besando el poste derecho, pudo Las Palmas adelantarse en el marcador, pues la suerte visitante se hizo patente, transformándose en la segunda parte en virtud.
Y de más a menos, el pragmatismo del Betis en el juego acabó madurando la manzana, hasta que en el minuto 65, la magia de Portillo y el acierto de Jorge Molina, se llevaron a efecto, con un gran pase el malagueño y una brillante finalización del ariete de Alcoy que abrían el luminoso del estadio de Gran Canaria.
Diez minutos más tarde, el bloque heliopolitano rubricaría la sentencia; y quien si no, lo haría el jugador más en forma de la plantilla a día de hoy tras recibir un centro de Varela, cuyo disparo, el de Molina, el protagonista en cuestión, se alojó en el fondo de las mallas canarias.
Por si fuese poco y si había una duda de que los tres puntos viajarían para Sevilla, Dani Ceballos sellaría la victoria con el tercer tanto de un Betis que ya ostenta el liderato en solitario de la Liga Adelante en un encuentro clave.