El delantero del Espanyol Martin Braithwaite regresó durante la madrugada del miércoles a Marbella, después de abandonar el lunes la concentración del equipo sin permiso de la entidad blanquiazul.

El futbolista, con su vuelta, suma un nuevo capítulo a un suceso que ha provocado un gran malestar en la entidad catalana. El director deportivo, Fran Garagarza, calificó el martes la actuación del danés como "muy grave" y avanzó que ya estaba en marcha la aplicación del código disciplinario.

El club catalán insiste en que Braithwaite es un activo del Espanyol y se remite a su contrato, que se alarga hasta el 30 de junio de 2025 y presenta una cláusula de rescisión de 7,5 millones de euros. Tanto esta cifra como su sueldo se redujeron a la mitad al bajar a Segunda División.

Más allá de la gestión de este escenario convulso en las próximas horas por parte de todos los implicados, el futbolista ya ha comunicado al Espanyol de forma directa que quiere dejar la entidad este verano. El atacante no se plantea jugar en Segunda y espera volver a la máxima categoría antes del cierre del mercado.