Descubren con más exactitud la edad del conejo a partir del peso del cristalino

Publicado: 12/05/2021
Un trabajo de investigación ha analizado por primera vez la relación entre la edad y el peso del cristalino para las dos subespecies de conejo de monte
Un trabajo de investigación desarrollado por un grupo de investigadoras de los Departamentos de Didácticas Específicas y Zoología de la Universidad de Córdoba (UCO), junto a investigadores del IESA-CSIC y la Universidad de Huelva (UHU) ha analizado por primera vez la relación entre la edad y el peso del cristalino para las dos subespecies de conejo de monte que habitan en la península ibérica, lo que permite conocer con mayor precisión la edad del animal.

Así lo ha indicado la UCO en una nota en la que ha detallado que el cristalino del ojo es una pequeña estructura situada detrás del iris. Libre de suministro sanguíneo y conexiones nerviosas, crece a lo largo de la vida de los animales sin estar prácticamente influido por las condiciones ambientales. Por ello, la estimación de la edad a través del peso de esta lente natural resulta ser un método eficaz.

En este contexto, tras examinar más de 285 ejemplares en dos instalaciones experimentales de España, el equipo ha logrado establecer una curva de crecimiento para cada una de estas dos subespecies. A partir de ahora, cualquier especialista que quiera conocer con exactitud la edad de estos conejos, "tan solo tiene que pesar el cristalino del animal y comprobar en el gráfico desarrollado por el grupo de investigación la edad que corresponde a cada peso", ha explicado la investigadora Patricia Vaquerizas, primera autora de la investigación.

Hasta la fecha, concretamente, se habían publicado datos sobre la relación entre la edad y el peso de la lente para una de estas dos subespecies. El problema, según ha subrayado la investigadora, es que "esta información estaba basada en conejos de Australia e Inglaterra, en los que este ejemplar está considerado como una de las 100 especies exóticas invasoras más dañinas del mundo".

Estos datos, sin embargo, "no se ajustaban bien" a la otra subespecie que habita casi exclusivamente en la península ibérica, "asignándole, por ejemplo, menos de ocho meses de edad a animales que ya habían cumplido el primer año de vida".

El nuevo trabajo permite ahora evitar este tipo de errores en la datación y estimar con mayor eficacia la edad de todos los conejos, lo que podría ser especialmente útil a la hora de comprender la dinámica poblacional de estos animales y mejorar así el éxito de los programas de gestión y conservación.

La confiabilidad de la edad estimada, por lo tanto, podría tener consecuencias en el caso de especies que juegan papeles económicos y ecológicos relevantes. Por ejemplo, los métodos precisos para determinar la edad podrían ayudar a garantizar el aprovechamiento cinegético, establecer periodos para abrir la veda de caza o para controlar a las poblaciones.

UNA NUEVA HIPÓTESIS

Los resultados del trabajo revelan la existencia de dos curvas de crecimiento del cristalino distintas para cada una de las dos subespecies de conejo analizadas, un distintivo que, unido a otras diferencias genéticas y morfológicas reportadas en estudios anteriores, permite reforzar la hipótesis de que estos ejemplares no son realmente dos subespecies, sino dos especies bien diferenciadas entre sí, una proposición que, en cualquier caso, deberá ser verificada en futuros trabajos.

"Sean o no especies distintas --ha concluido la autora principal del estudio--, el trabajo muestra el carácter diferencial de estos conejos y sugieren la necesidad de aplicar un marco de gestión específica para cada subespecie, especialmente para la que habita fundamentalmente en el sur y oeste de la península, ya que parece sufrir un declive más pronunciado".

© Copyright 2024 Andalucía Información