El presunto atracador que este pasado viernes fue detenido por la Policía Nacional poco después de asaltar, armado con una escopeta, la sucursal de Ibercaja en la Avenida del Gran Capitán, en la capital cordobesa, era buscado por atracar también a mano armada otras dos sucursales bancarias de la ciudad el pasado año.
Según ha informado la Policía Nacional, el primero de los atracos tuvo lugar en mayo de 2012 en una sucursal de Cajamar, donde el ya detenido, de 53 años, natural de Barcelona y residente en la barriada cordobesa de Las Palmeras, logró hacerse con un botín de 1.200 euros, mientras que el segundo atraco que se le imputa tuvo lugar un mes mas tarde, en una sucursal de Cajaduero, que como la anterior, está en la zona centro de la ciudad y donde se apoderó de 3.000 euros.
El presunto delincuente seguía un mismo 'modus operandi' en sus atracos: entraba a la sucursal con el rostro al descubierto, vestido con dos camisetas de colores superpuestas una sobre la otra, entrando a última hora de la mañana, justo antes del cierre de la oficina, cuando se encontraba la sucursal sin clientes, y se dirigía hacia una de las cajeras y tras encañonarla con el arma que ocultaba en un bolso, tipo bandolera, le exigía que le entregara el dinero.
Una vez conseguido su objetivo, se marchaba del lugar, quitándose la camiseta superpuesta y quedándose con la que vestía bajo esta, cogiendo un taxi en las inmediaciones y haciendo trasbordo con otro taxi con dirección a las afueras de la ciudad, concretamente hacia la Barriada de las Palmeras, donde esta persona residía.
EL ÚLTIMO ATRACO
En cuanto a su último y fallido asalto a un banco, el presunto delincuente fue detenido este pasado viernes momentos después de haber cometido el atraco con un arma de fuego larga, tipo escopeta, en la citada sucursal de Ibercaja, logrando apoderarse de un botín aproximado de unos 2.000 euros, los cuales una vez recuperados fueron entregados nuevamente a la entidad afectada.
Los hechos tuvieron lugar a las 14,00 horas del pasado viernes, cuando agentes que se encontraban realizando labores de prevención de la delincuencia recibieron aviso, por parte de la Sala Operativa del 091, de que se acababa de producir un atraco en una entidad bancaria, recibiendo momentos después un nuevo comunicado en el que se les informaba de que el presunto atracador había abandonado el lugar a bordo de un taxi, no sin antes dejar una bolsa con diversas pertenencias, entre ellas la escopeta, debajo de un vehículo.
Ante dicho comunicado, se procedió a realizar un cierre de la zona, con la finalidad de interceptar al vehículo con el que el atracador se dio a la fuga, siendo interceptado minutos mas tarde, cuando circulaba por la Carretera de Palma del Río, pudiendo los agentes recuperar el dinero robado.
