Hasta siete maestros se despidieron de las aulas al final del pasado curso escolar 2022-23. Fernando Pérez Castillo (Lapachar); Juan León Martínez, Carmen Gómez Vega (Cristo de las Misericordias), Concepción Cebrián Claver (Príncipe Felipe), Isabel Olmedo Neches (Virgen de Regla), María Visitación Moya Cansino (Salmedina) y Francisco Javier Sánchez Negrón (Caepionis) decidieron anunciar su jubilación, dejando a sus espaldas muchos años de trabajo diario, pero, sobre todo, centenares de alumnos. Uno de ellos, la actual delegada de Educación Virginia Porras, que quiso entregarles un reconocimiento en nombre de la comunidad educativa local. “Descubrí el amor por las letras y el respeto. Le debo mucho a las personas que han contribuido en mi formación. Soy el resultado de un trabajo”, expresó la delegada.
Le acompañó en todo momento el alcalde de Chipiona, Luis Mario Aparcero que, a su vez, desarrolló su carrera laboral como maestro en un centro educativo. “La sociedad la cambian los maestros desde las escuelas”, afirmó para resaltar la importancia de una profesión que, ahora, quedará en nuevas manos. “Animar a los docentes para que sigan creando el clima favorable para que la educación continúe siendo un pilar fundamental”, comentó.
Ahora, adentrados en una nueva etapa de sus vidas, los profesores deberán buscar nuevos retos. La colaboración con entidades sin ánimo de lucro siempre será una opción porque, después de todo, lo que les ha impulsado a estas personas a seguir adelante durante tantos años solo ha sido la felicidad de ver como otros progresan, en buena parte, gracias a su ayuda. “La satisfacción es ver a nuestros niños crecer y tener buenos resultados”, aseguró Aparcero.
