El candidato a la alcaldía por UPyD, Felipe Marín, cree que la conservación del Palacio de la aduana «es una cuestión innegocibale, por su declaración de BIC, derivada de su valor arquitectonico y el magnifico estado de conservación en que se encuentra una edificio que, pese a no haberse invertido cantidades importantes para su conservarción, muestra un buen aspecto tanto en su exterior como en sus salas interiores.»
Marín cree que es una irresponsabilidad el replanteamiento por parte de la Junta del posible derribo y tilda a Teófila Martínez de oportunista por achacar el retraso a la Junta de Andalucía cuando durante todos estos años han podido hacerse obras y proyectos en la zona sin que se hubieran vistos estorbadas por el edificio de la Aduana. «El derribo y su nuevo emplazamiento - afirma Marín- sería un gasto innecesario, casi unos once millones de euros, para un consistorio asfixiado económicamente, que responde al capricho de una alcaldesa que se precipita en vistas a las elecciones mientras mantiene en el limbo proyectos tan importantes para la ciudad como el pabellón Portillo, el museo del Carnaval, la remodelación del recinto exterior de la Zona Franca, el parque del cementerio o el Teatro Pemán.»
UPyD ya propuso en su día derribar la trasera del edificio, correspondiente al almacén. Ello supondría poner en valor el espacio comprendido entre el edificio en cuestión y la fachada de la antigua estación, creando así un espacio armónico dando protagonismo a dicha fachada. Junto a la propuesta, la formación denunciaba a los partidos responsables de Ayuntamiento y Junta el uso partidista de una cuestión tan importante para Cádiz como es su urbanismo. Por ello, Marín apela al sentido común y a la cordura de las distintas administraciones para desatascar los proyectos que mantienen a la ciudad en duermevela.