En palabras del Hermano Mayor, José María Valseca, “esperamos que éste sea un primer paso para un lugar de encuentro, no sólo para nuestros hermanos, sino para Écija en general, un eje vertebrador del desarrollo social y cultural de un barrio tradicionalmente excluido de estas manifestaciones”.
Por su parte, el Alcalde de Écija, Juan Wic, destacó en su intervención la importancia de poner en marcha este proyecto, pues “además de ser un deseo largamente perseguido por la Hermandad, es además un proyecto para poner en valor toda la zona del antiguo picadero, donde existen numerosos restos arqueológicos. Es, en suma, una manera de atraer a los visitantes hasta esta parte de la ciudad y que conozcan nuestros orígenes”.
En ese sentido también ahondó el Delegado Provincial de Turismo, Comercio y Deporte, Francisco Obregón, quien destacó que a partir de ahora, y una vez está en marcha esta casa hermandad con su museo y sus salas para realizar actos culturales, “Écija volverá a abrazar al Barrio de San Gil, y el Barrio volverá a mirar hacia la ciudad”, “la construcción de esta Casa Hermandad –recalcó Obregón- será un revulsivo para ampliar las visitas turísticas a la zona alta de la ciudad y para poner en valor, una vez más, el riquísimo patrimonio de arte sacro que poseen las hermandades y cofradías de Écija”.