El BOE acaba de sacar a información pública el que se considera como el primer paso para la implantación de la llamada autopista eléctrica que prestará servicio a buena parte de Andalucía Oriental. Se trata de una inversión inicial de 60 millones de euros para la línea de 400 Kilovatios de Caparacena y Baza, en la provincia de Granada. Un proyecto que pone en marcha Red Eléctrica de España (REE) y que hará posible la instalación de nuevas industrias en la zona y evacuar las energías renovables que se van a generar en dicho enclave. Se estima que, en total, la inversión que se desplegará será de unos mil millones en una comarca considerada como todo un desierto energético. La satisfacción es plena puesto que se dará salida a las expectativas creadas dotando, además, de un servicio eléctrico moderno a decenas de municipios, también, de las provincias de Jaén y Almería.
Siendo como es la medida todo un acierto y una imperiosa necesidad no se entiende cómo hasta ahora los distintos gobiernos de Mariano Rajoy la han dejado en el cajón del olvido o, lo que es lo mismo, fuera del Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2015-2020. Así hasta la llegada de los socialistas a la Moncloa que en un plis-plas, en el Consejo de Ministros de pasado 27 de Julio, la incorporaron a dicho documento estratégico atendiendo así a las reivindicaciones que desde Andalucía se venían haciendo desde años atrás. Cuesta trabajo pensar en las razones que llevaban a la anterior administración a negarse a dar luz verde a esta operación que tan beneficiosa es para esta tierra. Desde luego, no hay explicación alguna, máxime cuando hablamos de una empresa pública con enormes beneficios cada año. Lo cierto es que pronto estará en marcha y que los populares no quedarán muy bien en esta particular historia de dicho rincón de Andalucía.
Lo sucedido en este caso ilustra a la perfección la trascendencia de la inversión pública en el desarrollo del territorio y, en especial, de una comunidad como la andaluza que arrastra un déficit multimillonario en esta materia. A poco que se haga, se disparan los efectos positivos y el impulso económico de una sociedad que no puede perder más trenes. No está de más recordarlo ahora que se van a ver las caras el Gobierno andaluz y central. Todo hace indicar que habrá foto y poco más pero ha de tenerse en cuenta que los recursos públicos siguen haciendo falta y cuanto antes mejor. Pónganse de acuerdo, aquí no podemos esperar más.