Los sistemas de comunicación on line, a través de teléfonos móviles, han irrumpido en la vida de todas las personas que tienen terminales telefónicos con posibilidades de soportar estas aplicaciones. El segundo elemento esencial para el uso de esta tecnología es tener tiempo para ello.
Los seres humanos estamos abocados a comunicarnos, somos una especie especialmente dispuesta a ello, ya que la cooperación, esencial para la supervivencia, reside en esa capacidad de compartir información, conocimientos o sentimientos. En toda la larga historia de la humanidad nunca hemos podido establecer contacto con tanta facilidad y en número tan amplio entre nosotros. Y, ya se sabe que, cualquier nueva tecnología afecta muy en profundidad al modo de vida y sobre todo a la visión del mundo en el que vivimos.
Las redes de comunicación cada vez absorben más tiempo de cada persona y el tiempo es un bien escaso que debe ser administrado con prudencia. Cabe la posibilidad, más que cierta, de que el tiempo personal se diluya de tal forma que tareas precisas, en la vida de cada cual, queden relegadas e incluso inconclusas precisamente por la “inversión” de tiempo en los espacios virtuales.
Para algunas personas el ofrecerse a colaborar con otras en asuntos sociales o comunitarios tiene su importancia y de ahí el concepto militancia, como denominación de esta dedicación a temas comunes, no privados, que se suponen sin intereses particulares. Y claro está el Wassap o Telegram son utilizados por grupos de activistas que pretenden beneficiarse en sus comunicaciones con ello.
Hasta aquí todo fenomenal, la otra cara de la moneda surge cuando una vez constituido el grupo de comunicantes estos, sin casi advertirlo, acaban conformando una reunión permanente, que les lleva a comentar, argumentar, debatir, defender e incluso enfadarse sobre una multitud de aspectos. Además como los llamados “hilos” no son coordinados por nadie, y en toda reunión de trabajo es necesaria la coordinación, acaban solapándose unos con otros de suerte que debajo de lo que comenta alguien, otra persona escribe sobre un aspecto distinto y contestando a otro alguien que hace un rato dijo algo… En definitiva dos aspectos que en nada ayudan a mejorar la militancia que se pretende realizar, ya que al final todos los miembros del grupo militan exclusivamente en el grupo, viven para el grupo y claro ¡no hay tiempo para actuar en la realidad!,
Fdo Rafael Fenoy Rico
