Que no, que no arrancan, que según la última encuesta del CIS socialistas y populares están prácticamente empatados, vamos que si se celebrasen hoy elecciones generales lo mismo podrían ganar los unos que los otros. No es la primera vez que las encuestas indican éste supuesto empate técnico lo que sin duda es una pésima noticia para el PP. Digo que es una pésima noticia porque con la que está cayendo resulta increíble que el PP no haya sido capaz de generar mayores expectativas y confianza en los ciudadanos. Y es que el PP tiene un problema de liderazgo por más que Rajoy no se dé por enterado. Hay analistas políticos que aseguran que las elecciones no se ganan, sino que se pierden, es decir que el que las gana no es tanto por sus méritos como por los deméritos de su oponente. Si ésto es así, y algo si que es, Rajoy podría convertirse en presidente de Gobierno, si es que Zapatero pierde la confianza de los ciudadanos. Algunos dirigentes del PP reconocen off the record que Rajoy no entusiasma ni siquiera dentro de su partido, pero ha decidido llegar hasta el final y está convencido de que será presidente precisamente porque Zapatero no lo está haciendo bien. Así que Rajoy no está dispuesto a ceder el testigo ni siquiera aunque sepa, mejor que nadie, que hay otros dirigentes en su partido que tendrían más fácil ganar. La prueba de que Rajoy no cuaja es que encuesta tras encuesta suspende por más que en ésta última haya subida unas décimas, pero suspendido está. Claro que según la encuesta del CIS también Zapatero suspende en la consideración de los españoles, y de su Gobierno sólo aprueban la vicepresidenta de la Vega y la ministra de Defensa. Es pronto para saber que efecto va a tener en la opinión pública el nuevo Gobierno por más que en esta encuesta todos los nuevos ministros reciban un suspenso. El suspenso, en este caso, es injustificado porque aún no les ha dado tiempo ni de acertar ni de equivocarse, aunque hay nombres de peso como el nuevo titular de Educación Ángel Gabilondo, o la nueva ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, que sin duda ha sabido dar respuesta a la crisis de la gripe porcina, recibiendo elogios incluso de la oposición. En todo caso los ministros suspenden lo mismo que el presidente porque ante la crisis económica los ciudadanos tienen la impresión de que, a la vista de los resultados, el Gobierno no está haciendo las cosas bien. La principal preocupación de los españoles es hoy la economía y más concretamente el problema del paro. Ahora habrá que esperar al resultado de las elecciones europeas para saber si la encuesta del CIS ha acertado.