La Diputación Provincial de Granada y la Junta de Andalucía han finalizado las obras de la carretera GR-6101 en el tramo de 15,7 kilómetros que une la A-92 con los baños de Alicún de Ortega. Los trabajos han contado con un presupuesto de 3,8 millones de euros de los que 145.000 euros se destinaron a expropiaciones. La financiación de las obras está incluida en el convenio de cooperación en materia de carreteras entre la Diputación Provincial de Granada y la Consejería de Obras Públicas y Transportes.
El presidente de la Diputación, Sebastián Pérez, ha visitado hoy la carretera tras su apertura al tráfico junto con la diputada delegada de Economía, Fomento y Contratación, Inmaculada Hernández, y el delegado de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía en Granada, Manuel Morales.
La carretera presentaba una plataforma irregular y una anchura que en ningún punto del trazado sobrepasaba los 5 metros. Dada la importancia de la vía para la comarca se la ha dotado de una plataforma de 9 metros de ancho, con dos carriles de 3,5 metros cada uno y dos arcenes. Se mejora el trazado tanto en planta como en alzado siendo el radio mínimo de 75 metros y la pendiente máxima del 8 por ciento.
Sebastián Pérez ha formulado en nombre de la Institución Provincial su “agradecimiento a los técnicos de la Junta y de la Diputación que en este caso era la encargada de hacer estas obras”. El proyecto permite un mejor acceso a los baños de Alicún y también a municipios como “Dehesas de Guadix, Villanueva de las Torres o Gorafe que tenían que dar una vuelta muy grande y que en este momento ven una calzada nueva, ampliada y segura que mejora el acceso” a la A-92, ha explicado el presidente de la Institución Provincial.
“Esta zona de la provincia ha tenido un acceso difícil” que ahora se ve mejorado pues “creemos que tiene un enorme potencial de desarrollo turístico muy importante” con elementos como los baños de Alicún de Ortega, ha explicado Sebastián Pérez que ha resaltado que “en un momento como el que estamos viviendo, esto es lo que tienen que hacer dos instituciones como la Junta de Andalucía y la Diputación Provincial, unir voluntades y sensibilidades y resolver los problemas de la gente”.
El convenio entre las administraciones provincial y autonómica para el arreglo de la carretera GR-6101 que une Villanueva de las Torres con la A-92 “quedó ralentizado” en su día si bien de dos años a esta parte “quisimos activar” este proyecto, ha reseñado el presidente en presencia del delegado de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía en Granada, Manuel Morales.
Sebastián Pérez se ha congratulado, por último, de que la inversión de casi 4 millones de euros, “además de la proyección de la comarca, ha supuesto una cantidad de empleos muy importante para la comarca” con municipios “que vienen reivindicando desde hace muchos años su vertebración y desde hoy los tenemos más cerca del resto de la provincia y de la capital”.
En un acto en el que también ha participado el diputado delegado de Asistencia a Municipios, José Antonio González Alcalá, y tras dar a conocer los datos técnicos de esta nueva infraestructura viaria, la diputada delegada de Fomento, Economía y Contratación, Inmaculada Hernández, ha incidido también en que “la Diputación ha impulsado la terminación de esta carretera para atender a las necesidades de esta comarca que es una de las zonas más necesitadas de la provincia”
Por su parte, el delegado de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía, Manuel Morales, ha remarcado que las obras se han realizado “respondiendo a una realidad evidente de esta comarca”. Manuel Morales ha indicado también que la carretera mejora la calidad de vida de “vecinos de esta zona del Altiplano de Granada que se empeñan en permanecer aquí en esta comarca creando riqueza y un futuro para sus hijos”.
“Es una buena noticia celebrar que las instituciones nos entendamos para atender las necesidades de la ciudadanía”, ha afirmado Morales.
Las obras han supuesto un movimiento de tierras de 167.000 metros cúbicos de los cuales 115.000 corresponden a desmonte y 52.000 a terraplén. Para las obras de fábrica se preparó un estudio hidrológico de acuerdo con las directrices de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir teniendo en cuenta elementos como la rambla del Aljibe.
En el último kilómetro no se ha podido ejecutar una plataforma de nueve metros quedando reducida a seis metros dado que las consejerías de Medio Ambiente y Cultura limitaron las actuaciones en esta zona la primera por la existencia de plantas autóctonas a lo largo del talud y la segunda por la explotación de canteras de silex.
Con el fin de que la agresión al paisaje sea la menor posible, y según el informe técnico de la delegación de Fomento, Economía y Contratación, se han respetado las encinas próximas a la traza habiéndose tenido especial cuidado con los yacimientos arqueológicos existentes a lo largo de todo el trazado para lo cual se hicieron los estudios correspondientes para hacer posteriormente el correspondiente seguimiento arqueológico durante la ejecución de las obras.