Los últimos meses no han sido fáciles para Gloria Camila. En octubre la hija de José Ortega Cano y Rocío Jurado anunciaba su ruptura con David García tras cinco años de relación, asegurando que no había terceras personas en su decisión y dejando la puerta abierta a una posible reconciliación que, por el momento, no se ha producido.
Un duro golpe para la influencer al que se sumaba la aparatosa caída que su padre sufría en el metro días antes, en la que se rompía el hombro y de la que todavía se recupera con el apoyo incondicional de la joven, que termina 2024 con una batalla judicial abierta contra su exnovio Kiko Jiménez, al que el pasado verano decidía denunciar por maltrato psicológico -por las diferentes entrevistas que ha concedido hablando sobre ella y sobre su familia desde que rompieron en 2019- y con el que pronto se verá las caras en los Juzgados.
En lo profesional, también ha sido un año complicado para Gloria. En primavera lanzaba su propia firma de moda, 'Bakkus', y aunque tenía muchas esperanzas puestas en su negocio online -llegando incluso a aparcar sus estudios de Derecho para volcarse en su sueño-, las ventas no le han acompañado y se ha visto obligada a reducir los precios de las prendas para intentar salvar la marca, que por el momento sobrevive y con la que ya prepara nuevos diseños.
Un cúmulo de circunstancias, preocupaciones y decepciones que han hecho que la hija de 'La más grande' no esté atravesando su mejor momento. Y así lo ha confesado este 25 de diciembre compartiendo varios mensajes en redes sociales que han desatado la preocupación entre sus seguidores. "But I'm only human, and I bleed when I fall down" ("Solo soy humana, y sangro cuando me caigo" publicaba en un post en el que también ha incluido otra significativa frase: "La persona que yo más necesitaba me enseñó que yo no necesito a nadie", aunque no ha explicado si su texto estaba dirigido específicamente a nadie.
Lejos de quedarse ahí, Gloria ha publicado un storie con una imagen suya en primer plano llorando acompañada de una inesperada confesión que refleja que no está bien aunque intente aparentar lo contrario. "¿Soy la única que llora cuando se ducha y lo suelta todo? Está bien no estar bien, aunque sea Navidad" comienza.
"Estoy hoy un poco más sensible que de costumbre, este año está siendo un poco difícil por varios motivos, y es que creo que no se puede ir de fuertes por la vida cuando no sabes ni cómo sostenerte a ti misma" ha admitido, reconociendo que "estas fechas me ponen melancólica y sensible".
"Y se me pasan muchas cosas, personas y situaciones por la mente y entro en bucle" ha revelado, finalizando su mensaje afirmando que "solo quería desahogarme y reflexionar un poco con vosotros", visibilizando una realidad que no es de 'color de rosas' y que ha dejado preocupados a sus seguidores.