El Ministerio de Defensa turco anunció este martes que ha abatido en los países vecinos Irak y Siria a siete supuestos militantes del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda en Turquía.
"Nuestras heroicas Fuerzas Armadas turcas siguen luchando con operaciones ininterrumpidas para erradicar el terrorismo en su origen", sostiene el Gobierno turco en un comunicado publicado en redes sociales.
En concreto, informan de cuatro terroristas del PKK/YPG "neutralizados" (dejado fuera de combate) en el norte de Siria y tres del PKK en el norte de Irak.
El PKK se alzó en armas en 1983 para reivindicar la autonomía de los cerca de 15 millones de kurdos que viven en Turquía. Desde entonces, más de 45.000 personas han perdido la vida en esta guerra no declarada entre los rebeldes y las fuerzas de seguridad.
Denominado por las autoridades turcas como 'organización terrorista separatista' y considerado terrorista también por la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, el PKK ha instalado sus bases en el norte de Irak, región que Ankara bombardea con regularidad.
Debido a sus vínculos con el PKK, la milicia kurdosiria Unidades de Protección del Pueblo (YPG) es también considerada terrorista por Ankara, pero no por Washington y la UE, que la consideran aliada en su lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Turquía ha realizado varias intervenciones militares en su frontera con Siria, entre las que se incluyen las operaciones Escudo del Éufrates (2016), Rama de Olivo (2018) y Primavera de Paz (2019), para establecer su control en áreas donde a menudo son blanco de ataques del PKK y el YPG.