El profesor y matemático Pedro Ramos, uno de los pioneros en adaptar a España el "Método Singapur", que estudian 55.000 alumnos en nuestro país, aboga por cambiar el modo de enseñar las matemáticas desde primaria, dedicarle más tiempo y acabar con "el exceso" de asignaturas en la etapa de secundaria.

"Si queremos que el alumnado, sobre todo de primaria, entienda las matemáticas hay que empezar por lo concreto, poco a poco avanzar a la fase simbólica y enseñarle a pensar", subraya a EFE con motivo mañana del Día Internacional de las Matemáticas el profesor de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), coautor del Libro Blanco de las Matemáticas de la Real Sociedad Matemática Española.

55.000 estudiantes aprenden 'mates' como en Singapur

Asesor del proyecto "Matemáticas Singapur" de la editorial SM, Ramos da formación al profesorado en esta metodología, que se imparte a 55.000 alumnos y alumnas, y cuyo enfoque se basa en que los niños participen activamente en la resolución de problemas y pasen de la memorización a una comprensión más profunda de lo estudiado, orillando las tareas mecánicas, rutinarias.

En la ultima edición del informe Pisa, los escolares de Singapur obtuvieron los mejores resultados en las pruebas del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos (PISA, siglas en inglés), que cada tres años realiza la OCDE; la pequeña ciudad-Estado asiática ha tenido históricamente mucho éxito, en particular en matemáticas.

Según Ramos, del departamento de Física y Matemáticas de la Universidad de Alcalá, las bases pedagógicas adoptadas por Singapur hace unos 40 años son todas occidentales y "ellos lo que hicieron fue una síntesis de ideas". La experiencia española "es positiva: los niños comprenden mejor y, por tanto, tienen más gusto por la materia, pero son solo opiniones de los docentes estaría bien cuantificarlo".

"En 25 años no ha cambiado nada en España"

Sobre el plan de refuerzo en comprensión lectora y competencias matemáticas anunciado por el Gobierno, el miembro de la comisión de educación de la Real Sociedad Matemática Española de 2012 a 2021, cree que hay "un problema importante con la formación matemática de los y las maestras. Estudian en la carrera pero no es suficiente y a más de la mitad del alumnado de grado de Magisterio no les gusta esta materia, lo que se transmite cuando dan clase".

Tras advertir de que es "difícil" revertir en secundaria los déficits que pueda arrastrar un alumno desde primaria, el experto afirma que en España no ha cambiado "casi nada" en los últimos 25 años.

"No soy catastrofista y no creo que sean resultados muy malos los de la última edición del informe Pisa, pero sí son mediocres, estamos estancados y lo que hemos logrado es un aprobado raspado".

Para avanzar "hace falta cambiar el modo de enseñar matemáticas desde primaria. Cada vez hay más profesionales conscientes de ello y más centros aplican nuevas metodologías pero vamos muy despacio porque falta liderazgo en la enseñanza pública, ahí tienen ventaja la privada y la concertada porque la dirección tiene más poder".

También se necesita "un mejor currículo de matemáticas. El actual es muy poco concreto y la realidad es que son los libros de texto o los docentes los que están haciendo los que les parece. Está bien tener autonomía, pero hace falta concretar, es decir, al final de primaria qué debe saber el alumnado. Cuánto deben saber de fracciones, de problemas de geometría ... no está precisado".

En España se repite lo mismo curso tras curso

Por otro lado, añade, "cuando uno analiza el currículo de Singapur y sus libros de texto resulta que dedican más tiempo a cada cosa mientras que en España repetimos las cosas una y otra vez, explicamos en segundo de primaria un tema y como los alumnos no lo entienden lo volvemos a explicar en tercero y en cuarto y en 1º de la ESO".

Singapur dedica más tiempo a cada cuestión, pero "como lo hacen bien en ese momento no tienen que volver sobre ello tantas veces, al final consiguen avanzar más", agrega Ramos, que es partidario de más horas de matemáticas.

Otro problema de fondo, opina, es "el exceso de asignaturas en la secundaria. En 1º y 2º de la ESO hay diez u once asignaturas, eso una barbaridad para un niño de 12 años. Es muy difícil que se centren en las materias instrumentales como matemáticas o lengua si tienen diez asignaturas. Eso no ocurre en ningún país. Ocho ya son bastantes".

El próximo 6 de abril, el profesor será el conferenciante principal del congreso "Inspirando Maestros: Pensar las Matemáticas", organizado por Escuni, Fundación SM y colegios Marianistas en Madrid.

Su objetivo es brindar a los docentes herramientas y talleres de diversa índole que les ayuden en la práctica docente.