La regidora estuvo acompañada por la diputada provincial de Ciudadanía, María Naval, junto al director de la Delegación de Ciudadanía, Carlos Perales, el concejal delegado de Benamahoma y vicepresidente de AMHJA y coordinador de la Memoria Histórica en la Sierra de Cádiz, Joaquín Ramón, además de los alcaldes de los municipios de El Bosque, Benaocaz y Prado del Rey, y los familiares de las víctimas de represaliados en la Guerra Civil, cuyos restos se encuentran en este ahora primer Parque de la Memoria.
El mismo se erige sobre lo que ha sido siempre el Cementerio Viejo de Benamahoma, que fue camposanto hasta 1920. A partir de 1936 se convirtió en lugar de fusilamiento y enterramiento de los represaliados por el regimen franquista.
Se estima que se perpetraron desde 1936 los asesinatos de casi 150 hombres y mujeres inocentes de toda la Sierra, de localidades como Grazalema, Villaluenga del Rosario, Benaocaz, Ubrique, El Bosque, Prado del Rey y Villamartín, además de la propia Benamahoma. Las víctimas eran fusiladas en el muro del cementerio o en el muro anexo de la iglesia parroquial, y enterradas en cinco habitáculos en forma escalonada, que tras los estudios realizados, han demostrado que fueron depositados y cubiertos de cal viva para provocar la rápida descomposición de los cuerpos, dado el enorme volumen de fusilamientos producidos.
La utilización de cal viva ha hecho que los restos humanos desaparezcan, quedando sólo en la actualidad una fosa común rellenada de cal. En la investigación ha sido por tanto fundamental y determinante el testimonio oral de familiares y de personas de Benamahoma que vivieron en primera persona los hechos.
El proceso de creación de este I Parque de la Memoria comenzó con el traslado de los restos de los habitantes del municipio fusilados en el cementerio de El Bosque hasta el cementerio viejo, donde se les erigió un monolito con todos sus nombres. Ahora, el espacio se convierte en un contenedor de creaciones de artistas sensibilizados con la memoria histórica; aquí se verán esculturas de Andres Montesanto, José Hinojo, La escuela de Arte de Huelva y elementos de la cultura popular realizados en proyectos de participación ciudadana, ademas de ornamentación floral en la que destacarán doce pinsapos que simbolizan las doce localidades a las que pertenecen los fusilados.
