Agentes de la Policía Nacional han detenido a dos hombres, padre e hijo, de 42 y 23 años, respectivamente, tras supuestamente robar y atropellar en la huida al vendedor de un teléfono móvil de última generación en Málaga. A través de una conocida web de compraventa de artículos, los investigados concertaron una cita con la víctima para ver el objeto.
Una vez en el lugar pactado y tras ganarse la confianza del dueño del teléfono, uno de los arrestados comenzó a forcejear con la víctima y a golpearla hasta obtener su botín para acto seguido huir en coche, arrollando en la fuga al perjudicado, que trató de evitar en vano que aquellos escaparan.
Así lo han explicado desde la Comisaría provincial, apuntando que los hechos que iniciaron la investigación ocurrieron en la tarde del pasado 16 de julio, cuando un hombre denunció el robo con violencia de un terminal móvil que tenía en venta en Internet. Según comunicó el denunciante, una persona contactó con él a través de una web de compraventa mostrándose interesado en su producto y concretando una cita para su compra.
Una vez en el emplazamiento pactado, a las afueras de la capital, la víctima mostró el dispositivo a los supuestos compradores; en ese momento uno de ellos comenzó a forcejear y golpearle hasta conseguir arrebatarle el teléfono y huir hacia el coche en el que se habían desplazado.
La víctima, que trató de impedir que huyeran, resultó arrollada por el vehículo y, a consecuencia de las lesiones causadas, tuvo que ser hospitalizada.
En aras de identificar a los presuntos responsables y esclarecer los hechos, los investigadores consiguieron averiguar que los sospechosos seguían un patrón de actuación o "modus operandi".
Mostraban un interés fingido en productos ofertados en una web de anuncios para citarse con el vendedor y luego, una vez reunidos, aplicaban bien la fuerza o bien la intimidación --con una espada-- hasta conseguir sustraer el objeto.
Los datos facilitados por el denunciante y la rápida actuación de la Policía Nacional resultó determinante, ya que los agentes arrestaron al padre y al hijo el día 24 de julio en Puente Genil (Córdoba) donde residían ambos.
Allí se practicaron dos registros domiciliarios en los que se intervino, entre otros efectos, una espada cuya hoja medía 55 centímetros --más de un metro si se suma la empuñadura--, arma empleada supuestamente para intimidar a la víctima.
