Los españoles asumen completamente las funciones de la Force Protection con la adición de 120 militares de la Brigada de Infantería de Marina (Tercio de Armada), de San Fernando, y el Escuadrón del Grupo de Caballería Ligero Acorazado "Reyes Católicos" II de la Legión, de Ronda (Málaga).
Asimismo se amplia el destacamento de Entrenamiento y el Núcleo de Apoyo Logístico en Koulikoro y los puestos que el personal belga deja en Bamako.
En total, más de 11.500 soldados han sido entrenados por EUTM-Mali, lo que representa aproximadamente un tercio del ejército maliense.
El cuartel general de la misión, en Bamako, ha sido el escenario de la ceremonia de traspaso del mando del general de brigada belga, Bart Laurent, a su homólogo español, Enrique Millán Martínez, quien asume el puesto hasta diciembre.
A su cargo tiene una misión que lanzó la UE el 18 de febrero de 2013, a la que 27 Estados aportan cerca de 600 efectivos, la mitad de ellos españoles.
Su objetivo de apoyar a las autoridades malienses para restablecer el orden constitucional y democrático, y ayudarlas a ejercer su soberanía sobre todo el territorio y neutralizar el crimen organizado y la amenaza terrorista.
Se trata de la segunda vez que España toma el mando de esta misión -ya lo hizo entre octubre de 2014 y julio de 2015-.
Las Fuerzas Armadas españolas están en Mali para luchar contra el terrorismo y "defender el derecho a la protección y la seguridad de todos los españoles", porque "las amenazas no están a la vuelta de la esquina", ha destacado la ministra española antes de la ceremonia militar.
Su objetivo, ha agregado, ayudar a las Fuerzas Armadas de Mali "a luchar contra aquellos que quieren hacer de su país el pasto del terrorismo, la criminalidad y una tierra sin esperanza".
En el mismo sentido, el general Millán ha dicho que la situación de seguridad se ha deteriorado y se trata de impedir que Mali se convierta en "un santuario terrorista".
Para ello, durante su mandato, que se prolongará durante diez meses, la misión activará "destacamentos móviles" en el norte y en ciudades como Tombuctú, hasta ahora fuera del alcance de la EUTM.
La misión EUTM-Mali está repartida entre el cuartel general en Bamako y el campo de entrenamiento en Koulikoro, a unos 60 kilómetros de la capital.
Hasta ahora las Fuerzas Armadas españolas están proporcionando instructores al área de adiestramiento de operaciones especiales y al área de adiestramiento de morteros y apoyos de fuego, pero a partir de hoy también se encargarán de llevar el mando y la fuerza de protección de la misión.
Para dirigir esta misión, el Gobierno aprobó el pasado 22 de diciembre incrementar el número de efectivos hasta un máximo de 292, una decisión autorizada por el Parlamento el pasado 24 de enero.
