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Respuesta de consejera de Salud

Si desgraciadamente acudes a uno de estos servicios en cualquier lugar de Andalucía,te seguirás encontrando lo de siempre:muchos pacientes y pocos profesionales

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Si acudes a algún servicio de urgencias hospitalarias de Andalucía pasas a una sala de espera donde más bien tarde que pronto se te nombra o sale tu numerito en una pantalla. Debes acudir a donde se te indica, si no lo haces, se te da de alta porque se considera que te has marchado. ¿Qué ocurre si no estás en situación de acudir, ni siquiera de hablar? Pues esos han sido los casos de Aurelia en Úbeda, que ha muerto en una camilla y ha sido descubierta a las doce horas. Y el de Ángel en Antequera que sufrió un ictus en la sala de espera y después de cinco horas se reparó en él, cuando desgraciadamente era demasiado tarde.

Lo primero que podemos pensar que estas Áreas de Urgencias deben ser muy grandes para que el personal sanitario no repare en estos casos. Dónde están para que no entren en contacto con los pacientes. La segunda opción y la que obedece a la realidad es qué escaso debe ser el personal para que no tengan un trato más cercano con las personas a las que atienden.

Pues no ha sido esa la conclusión de la Consejera de Salud, Marina Álvarez, para ella personal no falta, lo que falla es el servicio de clasificación y ese es en el que dice va a introducir mejoras. No ha considerado en ningún momento que las urgencias estén sobresaturadas de pacientes que esperan durante horas porque la plantilla es insuficiente. Tampoco ha mencionado que para solucionar este problema no ayuda nada que seamos la comunidad autónoma con menos inversión por habitante en sanidad.

Ha considerado la muerte de Aurelia un problema de comunicación. Lo que hace su comentario posterior de que los servicios de urgencias andaluces atienden cada día a miles de pacientes y estos son casos aislados, es minimizar los hechos.

Así que si desgraciadamente acudes a uno de estos servicios en cualquier lugar de Andalucía, te seguirás encontrando lo de siempre: muchos pacientes y pocos profesionales. Volverá a haber casos de personas que acudan con dolor de cabeza y mareos y sufran ictus mientras esperan, porque la persona que clasifica no tiene rayos X en los ojos para detectarlos. Te clasificará como dolor de cabeza y mareos y la mejora es que podrá ponerte una pulsera que indique si sigues en el centro o te has marchado. Bienvenidas sean las pulseritas.

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