La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma emitió ayer una sentencia judicial en la que condena al alcalde de Llucmajor, Lluc Tomàs, a tres años de prisión e inhabilitación absoluta por tiempo de ocho años por un delito de malversación de caudales públicos, si bien le absuelve del resto de delitos de los que le acusó el Ministerio Fiscal.
Asimismo, la Audiencia condena a Joaquín Rabasco como autor responsable del mismo delito y por el que le condena a cuatro años de prisión, más otros ocho años inhabilitación absoluta y pago de otro quinto de las costas procesales causadas.
Asimismo, condena a Maria del Amor Aldao a dos años por considerarla autora del mismo delito de malversación de fondos públicos, y al pago de otro quinto de las costas procesales causadas. A la misma la Audiencia la condena a otro año de prisión por ser responsable de un delito de alzamiento de bienes y a una multa de doce meses a razón de 6 euros diarios y pago del restante quinto de las costas procesales causadas.
En caso de impago de la multa impuesta a esta última, la misma queda sujeta a una responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas dejadas de satisfacer.