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Marbella

El Ayuntamiento renueva la concesión de zona azul por cinco años más

El gobierno municipal ha argumentado que lo hace tras lograr mejoras en la movilidad y para evitar el perjuicio económico que supondría una batalla legal.

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El delegado de Movilidad de Marbella, Miguel Díaz, ha anunciado este jueves que el Ayuntamiento prorroga, otros cinco años más, la concesión del servicio de la zona azul, que regula el sistema de aparcamientos en las calles más comerciales del municipio y que vencía este viernes.

Díaz, que ha comparecido en rueda de prensa, ha destacado que el equipo de gobierno ha optado por renovar el contrato tras lograr "una importante batería de mejoras en el ámbito de la movilidad que hace que mejoremos el convenio 'trampa' que firmó el PP".

La concesionaria, ha señalado Díaz, se compromete a crear una red de 120 bicicletas públicas repartidas en nueve estaciones, instalar donde determine el Ayuntamiento tres puntos de carga de vehículos eléctricos, mantener en buen estado las señales verticales y horizontales de las zonas reguladas por el servicio o mejorar la empleabilidad de los trabajadores que desarrollan su labor en el municipio.

Las mejoras se implantarán "de forma progresiva". "Algunas se pondrán en marcha de forma inmediata y otras están condicionadas a la modificación de las ordenanzas que regulan la zona azul. Todas van a mejorar la movilidad en el término municipal", ha señalado.

Ha añadido, además, que la primera opción del equipo de gobierno era que el Ayuntamiento asumiera la gestión del servicio aunque "una profunda reflexión y un análisis técnico exhaustivo" han determinado que "la mejor decisión" era renovar el contrato.

"Cualquier otra decisión nos habría llevado a la incertidumbre de contencioso-administrativo con reclamaciones millonarias contra el Ayuntamiento y problemas inminentes para regular el tráfico en el casco urbano y en pleno mes de agosto", ha indicado.

La no renovación del contrato, ha agregado el concejal, habría supuesto que el Ayuntamiento dejara de percibir 900.000 euros anuales de canon, pagar 1,5 millones de euros para amortizar las máquinas expendedoras o que los empleados de la concesionaria en el municipio perdieran sus puestos de trabajo. "Se ha tomado la mejor decisión para el interés general y desde la transparencia y la responsabilidad", ha concluido.

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