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San Fernando Cofrade

El fuerte viento de Levante afea un Domingo de Ramos con novedades

La hermandad de Humildad y Paciencia llevó en cada uno de sus pasos una gubia con lazo negro en recuerdo de Alfonso Berraquero.

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El fuerte viento de levante afeó el primer día de la Semana Santa. Se cumplieron las previsiones y la cofradía de Humildad y Paciencia tuvo que cambiar parte de su itinerario de salida, para evitar las fuertes rachas. Era lo que ya se conocía aunque con la esperanza de que bajara el viento. Y lo hizo. En el centro de San Fernando a las 16.00 horas, en la que salía la primera cruz de guía de la Borriquita no se notaba la fuerza del extrarradio. La hermandad de Cristo Rey salía a la calle con la novedad del bordado de la túnica de Cristo Rey y sobre todo con la novedad del acompañamiento musical del paso de misterio, la agrupación Lágrimas de Dolores, que estrenaba banderín, cuyo motivo central ha realizado Jesús Vidal y complementado con bordados Matute.

La marcha Cristo Rey en La Salle, de Miguel Ángel Román, marcaba la salida del paso de misterio a hombros de los hermanos cargadores. Tarde emocionante en la capilla de La Salle, donde el pregonero de la Semana Santa, Manuel Jesús Sánchez Casas, acompañado por su padre, Antonio Sánchez Mallou, y su hijo, abrieron al unísono la puerta de La Salle. Esa puerta tras la que desde hace décadas, Antonio Sánchez Mallou disfruta de los primeros momentos de la Semana Santa isleña, con la guinda de poder abrirla.

La hermandad fue más ligera que de costumbre, algo que el público agradeció. La levantá del paso de misterio estuvo a cargo del expresidente del Consejo de Hermandades, Manuel Rivera, mientras que el de la Virgen de la Estrella, a cargo de Pilar Olmo. De hecho, el varal del paso llevaba un lazo negro en recuerdo del cofrade Eduardo Olmo.

Bello exorno floral de una Virgen de la Estrella, a la que acompañaba la banda de música del Nazareno con cornetas.

Desde la Ardila, a las 17.15 horas salía la Humildad y Paciencia. Rápido tomó calles diferentes a las previstas, acompañado por la agrupación Ecce Mater de Cádiz, para evitar las fuertes rachas de viento y así transcurrió por  Ponce de León, Al Andalus, Trajano, Doctor Florencio Pérez Gallardo, San Juan de la Cruz, Jovellanos, Plaza del Carmen, San Joaquín, Galiano y Real hasta la calle San José para seguir por Plaza de San José, Virgen de los Desamparados, Dolores, Pérez Galdós, Capataz Nicolás Carrillo, Plaza de la Iglesia, Real y Carrera Oficial, para seguir por lo previsto, pero cambiando también el final por Florencio Pérez Gallardo, Trajano y Avenida Al Andalus.

Mucho corrió la hermandad para llegar a la Plaza de San José después de que el palio de la Virgen de la Estrella se metiera en Dolores. Y más, para dar la vuelta y pasar por Carrera Oficial antes de que la hermandad de Cristo Rey subiera Héroes del Baleares. Tanto, que a las 21.10 el paso del Señor de la Humildad ya estaba ante la iglesia de San Francisco y ante la hermandad de la Caridad por su 75 aniversario, al igual que el paso de palio, mecido a los sones de la banda Maestro Agripino interpretando la nueva marcha Caridad y Salvación de José Ribera Tordera. Era el homenaje al 75 aniversario de la hermandad.

La cofradía homenajeó a Afonso Berraquero, con gubias con lazo negro en cada uno de los pasos. Vivió grandes momentos en el callejón Manuel de Arriaba, desde donde a las 20.45 horas ya había público esperando.

Por su parte la hermandad de Columna salió a la calle mostrando la nueva apariencia del paso de misterio con la imagen del Señor más alta que la de los sayones, algo con lo que el misterio ha ganado. En la salida, las levantás de los pasos estuvieron dedicadas al 75 aniversario de la hermandad de la Caridad y al 25 de la asociación cultural cofrade La Venera.

Nuevo acompañamiento musical para el misterio, la agrupación Esencia Tres Caídas, que recordaba a ese acompañamiento musical de hace años, con marchas propias de un Domingo de Ramos. Fantástico fue el acompañamiento de la banda Maestro Enrique Montero al palio de la Virgen de las Lágrimas.
El barrio fue un hervidero, porque la gente buscaba la estrechez de las calles para eludir un viento que a las 21.00 horas creció de nuevo, con rachas fuertes. Seguramente por el viento, las hermandades aceleraron su recogida. Así a Borriquita le sobraron 45 minutos, Columna llegó antes también a la iglesia Mayor y Humildad recortó itinerario para evitar el viento de regreso.

Fue un Domingo de Ramos que el viento afeó, pero mejor que el del año anterior, donde la lluvia quitó la posibilidad de los barrios y grandes momentos.

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