Unos 200 agricultores que pertenecen a la Comunidad de Regantes de La Algaida conocieron el nuevo embalse construido en la zona de El Tablazo. Fue tres días después de que la consejera de Agricultura de la Junta de Andalucía, Carmen Ortiz, inaugura esta infraestructura en una visita a Sanlúcar de Barrameda en la que resaltó el respaldo del Gobierno Andaluz. En su estancia en la ciudad, Ortiz estuvo acompañada entre otros por el alcalde de la ciudad, Víctor Mora, y por el delegado especial de La Algaida, Rafael Louzao.
Se utilizó la misma carpa que en el acto inaugural en un ambiente que fue mucho más sencillo y familiar, donde no faltaron los aperitivos y copas para celebrar este momento tan importante para el futuro de la agricultura de La Algaida. El presidente de la Comunidad de Regantes de La Algaida, Antonio Lara, resaltó que “le enseñamos a nuestros agricultores las nuevas instalaciones y el funcionamiento de las mismas. A los regantes les ha gustado la obra y como ha quedado el embalse. Fue un acto muy campechano y en donde todos se fueron muy satisfechos por lo que habían visto”.
Fue contundente al afirmar que “estas obras han sido muy importantes para La Algaida y muy necesarias porque es como comparar la vida con la muerte. Cada vez estábamos peor y este nuevo embalse nos hace ser más independientes. Hay que recordar que el 95% de las familias de La Colonia viven de la agricultura”.
Recuerda que “antes dependíamos de Costa Noroeste y ahora seguiremos con el suministro de agua aunque haya una avería o se estén realizando unas obras”. Valora que “La Algaida vive del agua. Con esta nueva balsa disponemos de más del doble de capacidad que antes. Estando lleno puede albergar un hectómetro”.
También hizo constar que “con este nuevo embalse anulamos una estación de bombeo, con lo que el agua sale impulsada desde la misma balsa”. De cara a los próximos meses lamenta que “nos espera un otoño que será bastante seco cuando ya hace falta que empiece a llover porque es bueno para el campo”.
La nueva balse de El Tablazo permitirá mejorar el sistema de regadío con el que contaban hasta la fecha los agricultores de zona. Mejorará el riego y la calidad del agua, por lo que las mejoras repercutirán directamente en la calidad de los productos que se cultivan en estas tierras.