Que el verano de 2016 esté siendo uno de los más secos del último siglo no es ningún secreto, pero esta situación pasa factura al estado de los embalses de la cuenca Guadalete-Barbate, a la que pertenecen los pantanos del término municipal de Arcos. No obstante, y al tratarse de un embalse que sirve de aliviadero al de Bornos, el de Arcos de la Frontera se encuentra al 92,86 por ciento de su capacidad total, almacenando actualmente 13 hectómetros cúbicos de agua. Su capacidad máxima es de 14 hectómetros cúbicos. El embalse se halla prácticamente en la media de los últimos diez años.
Sin embargo, la sequía afecta en términos más negativos, por ejemplo, al de Bornos, que se encuentra al 44,50 por ciento de su capacidad al almacenar ahora mismo 89 hectómetros cúbicos de agua de sus 200 hectómetros máximos. El año pasado por estas fechas almacenaba algo más de la mitad de su capacidad total.
En el caso del embalse de mayor capacidad de cuantos existen en el término de Arcos, y uno de los mayores de toda Andalucía, el de Guadalcacín, actualmente dispone de 458 hectómetros cúbicos, lo cual supone un 57,25 por ciento de su volumen total de almacenamiento. No obstante, está en los términos medios de los últimos diez años con una variación mínima. Por último, el embalse de Los Hurones, parece encontrarse en mejor situación, ya que registra actualmente 99 hectómetros cúbicos o, lo que es lo mismo, se encuentra al 73,33 por ciento de su volumen total. Sin embargo, se encuentra por encima de su media de los últimos diez años, que es del 61,85 por ciento.
En términos provinciales, los distintos embalses gaditanos acumulan 1.017 hectómetros cúbicos de agua de los 1.821 de su capacidad total, y se encuentran al 55,85 por ciento, 0,88 menos que el año pasado por estas fechas. En suma, los embalses tienen menos agua que hace un año y las previsiones, precisamente, no apuntan a que las lluvias puedan aliviar la situación de forma inmediata. Ya se sabe, el rigor del verano andaluz.
