Pocas veces unos gobernantes ofrecen su mejor versión aglutinando tantos piropos y tantas confluencias. Pocas comparsas tienen la virtud tan destacada como la afinación que derrochan desde el principio hasta el final de su participación, con una música que deleita.
Morado bajo el Pendón de Cádiz y lo que representa ante la interminable lista de mujeres asesinadas, “no solo de las feministas”, sino el terrorismo doméstico que compara con “los mejores años de ETA”.
Su Iglesia es la casa de sus padres donde tocan el cielo cada domingo.