La bella fuente que corona la calle Granados en su desembocadura con Beatas recrea desde hace muchos años un fascinante espectáculo mitológico, que además se ha convertido en un punto de encuentro para que ciudadanos y turistas contemplen el arte urbano de nuestra capital.
La escena recrea el baño de cinco ninfas que acompañan a la diosa Diana, en un singular montaje que rememora el clasicismo grecolatino. La mítica fuente El Baño de Diana, que en la otra cara aparecen representados los perros del cazador Acteón, que mira embelesado el chapuzón de las ninfas y su diosa, ha estado huérfana por culpa de un acto de incivismo que se llevó su principal protagonista, su pieza más preciada, la diosa Diana.
Los vándalos rompieron los pernos de sujeción y arrancaron de cuajo esta pieza de bronce que domina el conjunto artístico. La escultura ha estado desaparecida desde entonces.
Sin embargo, esta terrible pérdida ha llegado a su fin, gracias a la preocupación de una persona anónima por el patrimonio artístico de la capital, que tras localizar casualmente la escultura en una vivienda lo hizo saber a la policía y ya hoy Diana, la diosa, se encuentra en el lugar adecuado, las dependencias del departamento de patrimonio histórico-artístico del área de Cultura del Ayuntamiento de Málaga, y con las personas que se encargarán de devolver su lustre original.
La fuente El Baño de Diana se enmarca dentro del proyecto realizado por José F. Oyarzábal y Luis Bono, que supuso una reforma integral de la plaza Uncibay a finales de los años 80, y está compuesto por diversos conjuntos artísticos esculpidos en bronce por el escultor José Seguirio (Málaga, 1954) con influencia de la escultura griega arcaica.
La responsable del departamento de patrimonio histórico-artístico del consistorio, Fanny de Carranza, comenta que esta bella escultura volverá a su lugar de origen próximamente, tras ser sometida a un proceso de limpieza, que devolverá su esplendor de antaño. Así, tras sanear la fuente mitológica, los expertos colocarán esta pieza del malagueño José Seguiri con unos sistemas de seguridad más apropiados, que impidan nuevos robos o daños sobre esta figura.
Grecorromano
Y es que esta zona del centro histórico refleja la atracción del escultor malagueño por el mundo mitológico grecorromano, verdadero hilo conductor de su trayectoria artística. En el entorno de la plaza Uncibay y la calle Granados, Seguiri desarrolló la historia mitológica del cazador Acteón, que contempla anonadado el baño de la diosa Diana, así como su visión estética del famoso Rapto de la Sabina, acervo plástico que embellece desde hace lustros esta zona del casco histórico.