Los trabajadores de la escuela de hosteleríia de La Cónsula, los del centro de La Fonda en Benalmádena y los empleados del Cio de Mijas han salido esta mañana a la calle para protestar por su situación de abandono. La Junta de Andalucía les adeuda, al menos, las cinco últimas nóminas, como en el caso de La Cónsula, y más de un año de salario, en el caso de Mijas.
Los empleados están dispuestos a seguir con las protestas todos los miércoles y no descartan interrumpir las clases si no se libra el dinero para pagarles. Los trabajadores siguen dando clases a los alumnos de cocina y de sala, así como las prácticas en el restaurante, pero aseguran que no podrán continuar mucho tiempo. "Si no llega la liquidez no se podrá seguir con normalidad en la escuela", asegura Lucía Vargas, portavoz de los trabajadores de La Cónsula.
Los tres centros públicos arrastran problemas económicos desde el pasado curso, cuando se vieron salpicadas por la polémica de los cursos de formación. Por sus cocinas y salas han pasado en los últimos años algunos de los chefs de moda como Dani García. Los problemas se han acumulado en este curso, cuando la Junta ha decidido anular los consorcios que los gestionaban y trasladar la gestión directamente al Servicio de Empleo.
