El candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, ha presentado este viernes la hoja de ruta que defenderá la organización para las elecciones generales: una candidatura de unidad popular que respete la pluralidad de las diferentes fuerzas políticas y sin "hegemonía ni imposición" de ninguna de las formaciones que participen.
En rueda de prensa, Garzón ha explicado que su objetivo es conseguir una unión de todas las fuerzas políticas alternativas que consiga convertirse en el partido más votado en las próximas elecciones generales y desbancar al PP y el PSOE del Palacio de la Moncloa. Para ello, IU estaría dispuesta a renunciar a sus siglas en la papeleta electoral pero no a desaparecer como organización política.
Además, ha apuntado que, en caso de lograrse esta confluencia, él estaría dispuesto a no ser el cabeza de lista "si la gente así lo decide". Sin embargo, ha dejado claro que IU no está dispuesta a concurrir "bajo el paraguas" de Podemos, sino que todas las formaciones participen en una convergencia "construida desde abajo" y en la que ningún partido tenga la "hegemonía" ni imponga su superioridad.
Para lograr este acuerdo, Garzón iniciará una ronda de contactos en la que durante las próximas semanas prevé reunirse con el líder de Podemos, Pablo Iglesias, al que ha dedicado numerosos elogios. "Es una persona a la que tengo aprecio personal y considero un político brillante", ha reconocido confiando en que Iglesias sepa "leer el momento político". También quiere mantener encuentros con los líderes de otras formaciones como Equo, Compromís, Anova o Més.