La preocupación de los españoles por el desempleo, que ya había alcanzado cotas de hace tres años en el mes de septiembre, sigue creciendo en las encuestas del CIS, en cuyo último barómetro es citado como el principal problema para el 64,9% de los ciudadanos, casi dos de cada tres.
Tras el paro, también crece la preocupación por la economía, que es citada por un 54,7% de los encuestados, y desciende ligeramente la inquietud por la inmigración, aunque sigue siendo el tercer problema principal para un 24,5%, seguido del terrorismo y ETA, en cuarto lugar, con un 22,5.
La inquietud de los españoles por el desempleo se disparó en el anterior barómetro, correspondiente al mes de septiembre, y alcanzó un 62,2%.
Todo ello a pesar de que la anterior encuesta se elaboró entre el 5 y el 13 de septiembre, antes de que se desatara la crisis financiera y bursátil internacional, con la quiebra de bancos como Lehman Brothers o con la decisión de los bancos centrales de EEUU, Europa, Canadá, Japón, Suiza e Inglaterra de inyectar dinero en los mercados para mantener la liquidez.
En el barómetro de octubre –realizado entre los días 1 y 9 de ese mes– se resalta que la mitad de los ciudadanos (el 50,7%) cree que los problemas de índole económica son los que más le afectan personalmente, seguido del desempleo (un 31,1%) y la vivienda (mencionada por el 17,2% de los españoles).
Pese a ello, los encuestados creen que el paro es el cuarto problema al que el Gobierno presta más atención (un 14,6% opina así), ya que el 27,9% cree que dedica más atención a los problemas económicos, un 16% a la inmigración y un 15,1 al terrorismo.
Por otro lado, para el 63,4% de los encuestados la situación económica de España es mala o muy mala, frente el 30,8 que la ven regular y el 5% que cree que es buena o muy buena.
Casi la mitad de los españoles, un 47,5%, considera que dentro de un año la situación será peor, un 25,5 augura que será igual y un 12,2% piensa que irá a mejor.
Respecto a la situación política de España, el 40,5% cree que es mala o muy mala, un 38,5% regular y un 13,3% buena o muy buena.
Dentro de un año estará igual para un 45,1% de los ciudadanos, mientras que un 25,4 piensa que irá a peor y un 11,2% a mejor.
De acuerdo con la encuesta, el 45,3% de los españoles sostiene que la situación económica actual del país depende “bastante” de las circunstancias de la economía internacional, frente al 35,7% que cree que depende “mucho” de ello y el 10,5% que opina que depende “poco” o “nada”.
De la misma forma, casi la mitad de los ciudadanos –un 48,9%– opina que la coyuntura económica española depende “bastante” de las decisiones y la política de la UE, mientras que el 30,4% sostiene que depende “mucho” y el 11,2% que depende “poco” o “nada” de estos factores.
Para el 43,4% depende “bastante” de las políticas y decisiones del Gobierno, para el 39,8 depende “mucho” y para el 10,4 depende “poco o nada”.
Finalmente, un total del 42,7% de los encuestados por el CIS considera que la situación económica depende “bastante” de la actividad de las empresas y el rendimiento de los trabajadores, un 27,1% los que creen que depende “mucho” y un 21,4 los que sostienen que depende “poco” o “nada”.