Por tal motivo, desde hace varias semanas, el concejal mantiene con los técnicos de los departamentos de Urbanismo, Infraesctructuras, Contratación, Asesoría Jurídica y Subvenciones reuniones en aras a que “la máquina administrativa del Ayuntamiento funcione a la perfección”.
Con motivo de este impulso al trabajo de “sincronización están los plazos que vienen otorgados por otras administraciones públicas y aquellos asuntos en los que existe un compromiso municipal asumido y tácito”, en el primer apartado estarían “los proyectos del Fondo Estatal de Inversión Local o los del Programa de Transición al Empleo de la Junta de Andalucía (Proteja), mientras que en el segundo está el nuevo mercado de abastos”.
Según Aguilera, “en el trabajo que se viene haciendo desde hace varios meses es fundamental marcar un estricto calendario de tiempos, de tal manera que nadie de esta cadena de personas del Ayuntamiento propicie que haya cualquier dilación”.
Trabajo arduo
Con los fondos de inversión “el trabajo ha sido y es arduo, por cuanto los plazos son extremadamente cortos. Si a eso le sumamos que ha habido que redactar las ideas en anteproyectos, elaborarlos más tarde, licitarlos y llevar próximamente un seguimiento exhaustivo a las muchas obras se comprenderá fácilmente la tarea que desde el Ayuntamiento se está llevando a cabo”, resaltó el concejal.
Aguilera recuerda también que existe “analogía con proyectos municipales, como es el indicado anteriormente proyecto del nuevo mercado de abastos o proyectos medioambientales”.
Recordó que “el mercado ya tiene fecha de inicio de obras, el 11 de enero del año 2010. Para que eso se pueda hacer hay un calendario de pasos administrativos que se tienen que cumplir a rajatabla”. Además, en el pleno del próximo jueves “se lleva el anteproyecto del mercado y el estudio de viabilidad”.
Por ello, si este asunto “se dejase para el próximo mes ya no se podría iniciar las obras en la fecha indicada, y no estaría para el verano de 2012”.