La Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta en Almería ha advertido al servicio de Salud Pública de la existencia de una gran mancha anaranjada y oleosa detectada en la costa del levante almeriense, que, según los análisis, responde a la existencia en altos niveles de un tipo de microalga --dinoflagelados-- y no a suciedad, tal y como se habían quejado varios bañistas y asociaciones en las playas de Carboneras, Vera o Cuevas del Almanzora, entre otras.
Fuentes de Salud han indicado a Europa Press que para que estas microalgas puedan tener alguna incidencia en la salud, además de una presencia significativa de las mismas, es necesario que se den unas determinadas condiciones en el mar, como por ejemplo un fuerte oleaje que provoque la formación de aerosoles o pequeñas gotas que puedan ser absorbidas por las vías respiratorias.
Tras el aviso de Medio Ambiente, de manera preventiva, se ha alertado a los centros de salud de la zona, que están realizando un seguimiento activo y hasta el momento no han detectado ningún caso de reacciones que estén relacionadas con estas microalgas.
Desde la Delegación Territorial de Salud y Bienestar Social se está en permanente contacto con la Delegación de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente para el seguimiento de este fenómeno. En este sentido, Medio Ambiente va a continuar con los controles sobre la evolución de la microalga con lo que, si se detectase cualquier cambio, se tomarán las medidas oportunas para garantizar la salud de los ciudadanos.
Por otro lado, la Consejería de Salud y Bienestar Social lleva a cabo una toma periódica de muestras en las aguas de baño de todas las playas de la provincia, donde se estudia la presencia de microorganismos y otros elementos. Los análisis realizados hasta la fecha no han detectado que exista ningún problema que desaconseje el baño en esa zona.
Pese a esto, algunos colectivos y asociaciones vecinales como Veraplayazul de Vera (Almería), ha insistido en recomendar evitar el baño en las playas de la zona por la "suciedad" del agua aunque reconocen que los análisis periódicos oficiales la siguen considerando "apta para el baño". Los representantes vecinales advierten del peligro de infecciones estomacales, oído y piel por "los evidentes signos de suciedad, como espuma, restos de grasa y otros materiales flotantes".
