El fundador de Nueva Rumsa, José María Ruiz Mateos, ha pedido perdón a la juez de refuerzo del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, María Pascual, a quien la pasada semana tachó de la “mujer más mala” que había conocido en su vida, al tiempo que ha mostrado su disposición a trasladarse a declarar.
“Con respecto a la sucedido el pasado miércoles, 29 de agosto, quiero que sepa que si realmente no fue como yo lo interpreté le pido perdón”, afirma el empresario en una carta remitida a la jueza de Palma, quien ese mismo día dictó un auto de libertad provisional para Ruiz-Mateos, tras negarse a declarar por una presunta estafa de 13,9 millones de euros en la compraventa de un hotel de Mallorca.
“Tenga encuenta que estoy sufriendo la injusticia desde hace 30 años y la experiencia me ha mostrado sucesos orribles y vivo de milagro, por tanto no ha de extrañarle que pasara por mi mente cosas macabras”, le indica en la misiva a la jueza. Por ello, Ruiz-Mateos, pese a haber enviado su declaración por correo, muestra su disposición a trasladarse a Palma de Mallorca para declarar ante la jueza si así lo deseara.
La jueza de refuerzo del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, María Pascual, dejó este pasado miércoles a Ruiz-Mateos en libertad provisional tras acogerse a su derecho de no declarar. A su salida de los Juzgados de Palma, Ruiz- Mateos aseguró que la jueza era la “mujer más mala” que había conocido en su vida y el “más malo de los demonios y la más malvada. A partir de ahora, con todo lo que me ha pasado, ya me da igual morirme”, afirmó.