El concejal delegado de Patrimonio, Gabriel Orihuela, manifestó ayer a este diario que “las obras estaban pendientes de la instalación del alumbrado, que se enmarca en el mismo proyecto”.
Por tanto, incidió, “ya se han recepcionado las luminarias que serán instaladas en dicho recinto” unas operaciones “que se vienen desarrollando en las últimas fechas”.
Al respecto, Orihuela destacó que esta es una actuación “externa al Ayuntamiento”, dado que están siendo gestionadas por el organismo provincial.
No obstante, incidió, “como suele ser habitual en estos casos, antes de la recepción de las obras, los técnicos giraron una visita a las instalaciones y elaboraron una relación de pequeños remates”.
Por ello, en la actualidad “el proyecto se encuentra en la fase de culminación de dichos remates y de instalación de la iluminación del recinto amurallado”.
De forma paralela, además de la adecuación de la zona de las murallas, se están dando los últimos retoques al centro de interpretación, ubicado también en la prolongación de la avenida Blas Infante.
Ambas actuaciones se llevan a cabo con fondos europeos y cuentan con la cofinanciación del Ministerio de Cultura y del IEDT.
Como se recordará, el proyecto de puesta en valor de las murallas meriníes cuenta con un presupuesto que supera los 2.110.000 euros y se complementa con la puesta en marcha de un centro de interpretación de la cultura meriní, realizado a través de una inversión que ronda los 600.000 euros.
Por su parte, el proyecto para dotar de iluminación a dicho recinto está dotado 60.000 euros, según informó en su momento el alcalde, Tomás Herrera.
