Según el inventario de entes dependientes de las Comunidades Autónomas, elaborado por el Ministerio de Economía y Hacienda, la mayor presencia financiera de las comunidades en el conjunto del gasto público ha conllevado la creación de nuevas entidades para la gestión de los distintos servicios públicos.
Así, el número de consorcios, entidades públicas empresariales, agencias o fundaciones creadas por las comunidades han aumentado en los últimos años, en un ránking liderado por Cataluña, con 335 entes, 48 más que en el año 2003.
Le sigue Andalucía, con 317 entes (267 hace seis años) y, a larga distancia, Baleares, con 166, frente a los 107 de 2003.
En 2009, Madrid 137 organismos de diferente naturaleza, 17 más que en 2003.
Las comunidades que menos han recurrido a este tipo de organismos son La Rioja (30), Asturias (63) y Cantabria (65), además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, con 19 y 10 respectivamente. En términos porcentuales, destaca el incremento de estas estructuras administrativas en Castilla-La Mancha (un 95%) y Cantabria (75,7%).
Por tipos, los consorcios (583) son la fórmula preferida por las autonomías, seguidos de las sociedades mercantiles (539) y las fundaciones (409).
Las televisiones y radios de las comunidades, sus universidades, teatros o servicios de salud están constituidos en muchos casos bajo esta tipología de entes.