Si se atiende exclusivamente a las imágenes que dejaron los representantes de las instituciones públicas durante el primer trayecto del Trambahía entre Cádiz y Chiclana y el acto oficial, en talleres y cocheras en Pelagatos, podría pensarse que la inauguración del esperado nuevo medio de transporte público no tuvo nota discordante. Pero la tuvo. La pusieron los alcaldes de Cádiz, Chiclana y San Fernando, quienes aprovecharon sus intervenciones ante los medios de comunicación para matizar la felicidad desbordante del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez.
Quien se mostró más crítico fue, sin lugar a dudas, el primer edil de la capital gaditana. José María González, Kichi, ha mostrado su disconformidad con los horarios y trayectos del tranvía desde que se conocieron a principios de la semana pasada. “Es una oportunidad perdida”, ha insistido desde entonces.
Este miércoles, insistió en que, si bien “debemos estar orgullosos” por la apuesta por la movilidad, “ni las frecuencias ni el precio son los que deben ser”, teniendo en cuenta que el autobús tarda unos quince minutos menos entre Chiclana y Cádiz por el mismo coste para el usuario. “Estamos hablando de una infraestructura que tendría que haber funcionado hace una década. Quizás está parida con la perspectiva” de entonces, reflexionó, por lo que “responde a las necesidades” de hace diez año, “no a las de ahora”, prosiguió. Por ello, consideró “urgente”, pero sobre todo “necesario”, que la Junta de Andalucía “se plantee una adaptación a la modernidad de las posibilidades que puede ofrecer” el tranvía. E introdujo un nuevo elemento para el debate: “Sería un éxito que siempre llegara a Cádiz”, dado que, de acuerdo a la planificiación inicial, solo lo hará en la mitad de las 37 expediciones previstas cada jornada en días laborables.
“Creemos debe incrementar la frecuencia de salidas, porque cada hora se queda un poco corto”, valoró, por su parte, el alcalde de Chiclana, José María Román, dándole la razón a Kichi, quien añadió que “esperemos que se vaya arreglando y vayamos viendo cómo efectivamente se configura como un transporte alternativo, no tanto al autobús, sino al vehículo privado”. Por el momento, prefirió mantener la cautela ante el triunfalismo y el optimismo mostrado tanto por Juanma Moreno como por Raquel Sánchez. “No sabemos si será un momento histórico, el tiempo lo dirá”, agregó, aunque sí concedió la importancia de contar con una alternativa de movilidad sostenible y su interés como atractivo turístico, dado que atraviesa parajes del Parque Natural de la Bahía.
Finalmente, Patricia Cavada, regidora de San Fernando, quien también evitó dejarse llevar por el entusiasmo, planteó el reto compartido con la Junta de Andalucía de lograr que, con el tranvía, más vecinos decidan trasladarse hasta La Isla para disfrutar de los eventos y la oferta de ocio y gastronómica de la ciudad, y convivir con el paso de los trenes. “Llevamos ocho años conviviendo en realidad”, pero remarcó que, a diferencia de Chiclana o Cádiz, en su localidad atraviesa el casco urbano.
