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Alcalá la Real

En funcionamiento dos nuevos surtidores para uso fitosanitario en La Laguna y Caserías

Las dos nuevas instalaciones cubren las aldeas de La Rábita, San José de La Rábita, Las Grajeras, Caserías de San Isidro y Fuente Álamo

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  • Visita a uno de los surtidores puestos en servicio.

El alcalde, Marino Aguilera, junto con el concejal de Agricultura, Jesús Aguilar,  y los alcaldes pedáneos de La Rábita, San José de la Rábita y Las Grajeras visitaron ayer por la tarde el último de los surtidores que ha entrado en funcionamiento en el municipio para la carga de agua necesaria para las labores de tratamientos fitosanitarios.

Según detalla Aguilar, “se trata de un punto estratégico, instalado en La Laguna, y que presta servicio a estas tres aldeas, dada su cercanía. Queríamos buscar un punto que fuese común a estas pedanías para que el servicio fuese cómodo y lo más cercano posible a los vecinos que necesitan usar este recurso. Recientemente también ha entrado en servicio otro punto de llenado en la aldea de Caserías de San Isidro, que desde hace años venían demandado los agricultores de esta zona, pues el más cercano para ellos es el surtidor de Puerto Llano y les queda a mucha distancia”.

Con el de Caserías de San Isidro son ocho los surtidores instalados en todo el término municipal de Alcalá la Real, sumándose a los que ya entraron anteriormente en funcionamiento y que se ubican en Puerto Llano, Peñas de Majalcorón, La Pedriza, La Hortichuela, Ermita Nueva (zona de la Cruz del Piojo) y Santa Ana (en la salida por la carretera de La Carraca). “La aldea de Fuente Álamo también queda cubierta puesto que se encuentra a unos 4 kilómetros tanto del surtidor de Caserías de San Isidro como del de La Laguna”, aclara el edil.


Jesús Aguilar recuerda que los surtidores “se accionan mediante una tarjeta prepago, que las personas interesadas pueden solicitar directamente en Casa Pineda, sede del área de Agricultura, mediante un procedimiento muy sencillo para el que solo es necesario aportar los datos personales del interesado y adjuntar una declaración de cultivo”.

La disponibilidad de agua, con objeto de propiciar la buena administración de un bien tan escaso, se ha limitado a 2.500 litros por hectárea. Además de estos surtidores existe uno más de uso público en Venta de Agramaderos, si bien, éste no asegura disponibilidad de agua. Por su parte, en Ribera Alta cuentan con otro más que presta servicio a la comunidad de regantes.

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