El PSOE, Unidas Podemos y sus socios han tumbado este martes en el Pleno del Congreso la proposición de ley con la que Vox buscaba derogar el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y evitar en el IRPF la tributación de cualquier ganancia a través de herencias, legados, títulos sucesorios o donaciones.
La propuesta, que este martes enfrentaba su votación de admisión a trámite, ha sido rechazada con los votos de PSOE, Unidas Podemos, Esquerra Republicana, el PNV, EH-Bildu, el PDeCAT, Junts, Más País-Equo, la CUP, Compromís, el BNG, Teruel Existe y el PRC. Frente a ellos, han votado a favor el PP, Vox, Ciudadanos y Foro Asturias.
En la defensa de la iniciativa, la portavoz fiscal de Vox, Inés Cañizares, ha asegurado que este impuesto no es redistritutivo, genera desigualdad, desincentiva el ahorro, no es progresivo y provoca la renuncia a herencias de la clase media y trabajadora.
Tras poner el ejemplo de casos donde ni con un préstamo una trabajadora era capaz de asumir una herencia de un piso, varios diputados han ironizado con un cambio de asesoramiento fiscal por los cálculos expuestos, acusando a Cañizares de "populismo", "demagogia" y de propagar bulos.
EL PP ESGRIME QUE LOS RICOS YA ELUDEN SU PAGO CON SOCIEDADES
Eloy Suárez Lamata, del PP, ha defendido también la derogación del impuesto, destacando que comunidades gobernadas por los 'populares' lo bonifican hasta el 99% porque no lo pueden suprimir, y ha asegurado que los ricos eluden su pago con sociedades patrimoniales o de inversión.
Ciudadanos, a través de su diputada María Muñoz, ha asegurado que no es redistributivo y rompe el principio de igualdad, al haber comunidades que lo gravan al 40% y otras al 99% y ha propuesto mejoras, como ampliar sus beneficiarios o ampliar el plazo para pagarlo, si bien ha defendido su supresión.
¿QUIÉN PUEDE PAGAR SERVICIOS PÚBLICOS SI NO HAY IMPUESTOS?
Valentín García Gómez, del PSOE, se ha preguntado cómo es posible, si se suprimen los impuestos, que una familia pueda pagar una estancia hospitalaria de 67.000 euros en el nacimiento de un neonato, un transplante de corazón cuya operación supone 107.000 euros, pero tampoco las últimas ayudas al transporte, el campo, o las prestaciones durante la pandemia. "Si suprimimos impuestos, sólo podrá pagarlo el que tenta riquezas propias o heredadas", ha dicho.
Por Unidas Podemos, Txema Guijarro ha tildado de "soberana sandez" que pueda desincentivar el ahorro cuando el consumo está "fuertemente gravado" y ha señalado que las desigualdades que genera son las que provoca las exenciones impulsadas por comunidades, como la de Madrid, al convertirse en paraísos fiscales para los más ricos.
"UN INTENTO DE LA DERECHA PARA QUE LOS RICOS PAGUEN MENOS"
Desde el PNV y el PDeCAT se han mostrado dispuestos a "reformular" el impuesto, aunque dentro de todo el sistema tributario y de financiación autonómica, pero han rechazado la exposición de Cañizares por "populista" y "demagógica".
"Esto lo hacen para sus amos, no hacen nada por sus trabajadores", ha dicho Joan Baldoví (Compromís), mientras que Néstor Rego (BNG), que compartía la necesidad de hacer exenciones en herencias de patrimonios menores, veía la iniciativa como "la última propuesta para que los ricos paguen menos impuestos". Joan Margall, de ERC, ha señalado que el 83% de las herencias superan los 150.000 euros y que "sólo las más cuantiosas pagan más de 10.000 euros".